¿Por Qué Idealizamos a los Enamorados?

Cuando caemos en las garras del amor, nuestra percepción de la persona amada se transforma en una idealización casi mágica. La famosa frase "el amor es ciego" nunca ha tenido más sentido. Pero, ¿qué hay detrás de esta transformación de nuestra mente?

La psiquiatra y experta en relaciones, Marian Rojas Estapé, desentraña este fenómeno en su reciente podcast. Nos explica que, al enamorarnos, el cerebro libera una explosión de neurotransmisores y hormonas como la dopamina, la oxitocina y la serotonina, creando una burbuja de felicidad y deseo que nos hace ver todo a través de un filtro rosa.

La Química del Amor: Un Viaje Inigualable

La mente se encuentra en un torbellino emocional. Rojas Estapé comparte una frase reveladora de su padre: "El amor puede ser muy ciego al llegar, pero cuando se va, se hace muy explícito". Esa ceguedad se produce porque la amígdala cerebral interfiere y bloquea la corteza prefrontal, la parte del cerebro que nos ayuda a tomar decisiones racionales y a ver la realidad tal cual es. No importa si tu amado tiene una diferencia de edad significativa o si es el esposo de tu mejor amiga; en esos momentos, solo sentimos.

Los Altibajos del Amor: Un Despertar Doloroso

Los estudios sobre el amor destacan su importancia psicológica, mejorando nuestro bienestar emocional y autoestima. Sin embargo, esta fase de euforia no es eterna. Cuando se evapora esa chispa inicial, la realidad golpea con fuerza: "¿Cómo no vi esto antes?". Rojas Estapé nos brinda un consejo valioso: al inicio de la atracción, tómate un momento para reflexionar si realmente esa persona te conviene.

Reflexiones Finales: ¿Amor o Ilusión?

La próxima vez que sientas mariposas en el estómago, recuerda que detrás de esa pasión se esconde un complejo entramado químico. El amor puede ser una fuente de felicidad, pero también un espejismo que requiere discernimiento. Así que, ¡abrázalo, pero no olvides poner en marcha tu mente crítica!