
¡El Ciclo del Agua Está en Crisis! Descubre Cómo Impacta Nuestro Planeta
2025-03-27
Autor: Marta
Desde el inicio del siglo XXI, los reservorios de agua en la superficie terrestre han comenzado a disminuir drásticamente. Según investigadores que han analizado el aumento del nivel del mar, el desplazamiento del eje terrestre y los cambios en la humedad del suelo, las masas de tierra han perdido más de 1,600 gigatoneladas de agua desde el año 2000. ¿Te imaginas cuánto es eso? Cada gigatonelada equivale a mil millones de toneladas. Pero, ¿a dónde ha ido toda esta agua? En gran parte, al océano, contribuyendo al aumento del nivel del mar y afectando la rotación de nuestro planeta. Estos hallazgos, publicados en la revista Science, advierten sobre cómo la actividad humana ha alterado un fenómeno que, durante miles de años, se había mantenido relativamente estable desde el final de la última edad de hielo.
En los libros de Ciencias Sociales de cuarto de primaria, aprendemos sobre el ciclo del agua, un sistema cerrado donde el agua cambia de ubicación pero su masa total se mantiene constante. Sin embargo, la realidad que enfrentamos es diferente. "La cantidad total de agua en la Tierra no cambia significativamente, a excepción de pequeñas pérdidas al espacio", señala Dongryeol Ryu, profesor de Hidrología en la Universidad de Melbourne y coautor del estudio. Su investigación sugiere que entre 2000 y 2002 hubo una notable disminución en la humedad del suelo, y que esta tendencia no solo se mantiene, sino que podría intensificarse.
El deshielo de Groenlandia y la Antártida ha sido una importante fuente de agua para los océanos, pero, sorprendentemente, la pérdida de humedad del suelo ha superado esta aportación, lo que indica que la extracción de agua de los ecosistemas terrestres puede tener consecuencias a largo plazo para el nivel del mar.
Para llegar a estas cifras impactantes, los científicos utilizaron datos de satélites y boyas distribuidas por los océanos para medir la elevación del nivel del mar. En los últimos años, ha aumentado en promedio 4.4 milímetros, un aumento que, aunque parezca pequeño, tiene un efecto acumulativo significativo dado el vasto tamaño de los océanos.
Además, se ha observado que el desplazamiento del eje de rotación de la Tierra está relacionado con la redistribución del agua debido a factores humanos. "Este movimiento se debe a la alteración de las masas de agua y aire en la superficie terrestre, incluyendo la humedad del suelo", expone Ki-Weon Seo, investigador de la Universidad Nacional de Seúl.
Un factor crucial detrás de esta crisis es el cambio en los patrones de precipitación. Las sequías son cada vez más frecuentes y severas, y estudios recientes indican que el aire en Europa se encuentra en su estado más seco en 400 años. Esto no solo afecta a las reservas de humedad, sino que también está provocando la muerte de árboles y la sobreexplotación de acuíferos, como se ha evidenciado en muchas ciudades chinas. Además, la lluvia que ocurre ahora es más intensa y menos frecuente, lo que lleva a que el agua se desvanezca rápidamente hacia el mar en lugar de infiltrarse en el suelo.
Los pronósticos no son alentadores. Los investigadores advierten que este agotamiento de los recursos hídricos podría ser irreversible si las temperaturas globales continúan aumentando. "La tasa actual de pérdida de agua terrestre supera su reposición", advierte Seo. Sin cambios significativos en el clima, es probable que el desequilibrio en el ciclo del agua persista, lo que provocará una pérdida neta de agua de la tierra hacia los océanos con el tiempo.
Sin embargo, no todos están de acuerdo con estas conclusiones. Sergio Vicente Serrano, del Laboratorio de Climatología y Servicios Climáticos del IPE/CSIC, expresa su escepticismo, sugiriendo que los datos utilizados podrían no ser precisos. A pesar de las diferencias de opinión, todos coinciden en que la creciente demanda atmosférica y el cambio climático están alterando dramáticamente el entorno natural. ¡Es un momento crítico para el futuro de nuestro planeta y el calidad del agua que nos queda!