Este 12 de octubre, la Fiesta Nacional de España se llevó a cabo con un ambiente festivo pero marcado por la inclemencia del tiempo. La tradicional parada militar, que debería haber incluido un espectacular desfile aéreo, fue considerablemente reducida a causa de la lluvia torrencial que azotó Madrid a lo largo de la jornada.

A pesar de que más de 4,000 efectivos de las Fuerzas Armadas estaban preparados para marchar, la Patrulla Águila, conocida por sus impresionantes acrobacias aéreas, tuvo que cancelar su participación, dejando a muchos asistentes decepcionados. Este año, no solo la Patrulla Águila estuvo ausente, sino que también se suspendieron los tradicionales saltos en paracaídas, lo que hizo que el evento de este año se sintiera diferente y menos festivo que en ocasiones anteriores.

Durante la ceremonia, los reyes Felipe VI y Letizia, junto con la princesa Leonor, presenciaron el desfile, en el que los ojos de todos se centraron en la joven princesa, quien lucía un elegante uniforme de Guardia Marina. Este fue su segundo desfile del 12 de octubre, y aunque la lluvia empapó a todos los presentes, la chimenea de miradas entre ella y su padre fue un momento destacado de la jornada.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, también estuvo presente y tuvo que hacer frente a abucheos y pitos de algunos miembros del público al llegar al evento. Las revelaciones recientes sobre el escándalo de 'Koldo' y otras decisiones gubernamentales han provocado el descontento de una parte de la ciudadanía, lo que reflejó el clima de tensión política en el país.

Numéricamente, el desfile contó con la participación de 4,092 miembros de las Fuerzas Armadas, de los cuales solo el 13% eran mujeres, lo que representa un desafío en términos de inclusión en las fuerzas armadas. Además, un total de 210 caballos y 266 vehículos motorizados formaron parte del recorrido, que se extendió a lo largo de 1,540 metros desde el Paseo del Prado hasta la Plaza de Colón, donde la tribuna real estaba ubicada.

En términos de discursos, el presidente Sánchez proclamó en sus redes sociales que "España es el mejor país del mundo", recordando a todos los presentes que este día no solo se celebra la historia de España, sino también la identidad de todos los españoles.

El evento ha sido declarado por algunos líderes y figuras políticas como una celebración que también debe incluir una reflexión crítica sobre la historia de España y su legado colonial, especialmente en el contexto actual donde se busca una mayor inclusión y reconocimiento de las diversas culturas que conforman la nación.

Con la presencia de personalidades políticas clave y la participación de diferentes cuerpos y fuerzas de seguridad, este desfile se convierte en un símbolo de la unidad nacional, pero también resalta las divisiones y debates en curso sobre la identidad y la historia españolas en un mundo cada vez más interconectado y diverso.

Aunque la lluvia intentó opacar el espíritu del evento, las tradiciones se mantuvieron vigentes, y los momentos emotivos, como el homenaje a los caídos, recordaron a todos que, tras las complicaciones externas, el patriotismo y la celebración de la herencia española aún tienen un lugar importante en el corazón de muchos.