Un Adiós a lo Grande

El 21 de abril, el mundo se detuvo al recibir la noticia del fallecimiento del Papa Francisco. Tras una penosa enfermedad, Jorge Mario Bergoglio dejó este mundo a las 07:35 horas, tras ser diagnosticado con neumonía bilateral y sufrir un ictus, según informan fuentes médicas. Su cuerpo fue trasladado a la majestuosa Basílica de San Pedro, donde recibirá el último adiós de millones.

La Última Voluntad de un Líder Espiritual

Cumpliendo su deseo personal, el féretro del Papa es significativamente menos ostentoso de lo habitual. En lugar del tradicional catafalco, descansa en un ataúd de madera y zinc, reflejando su humildad y carácter sencillo.

La Innovadora Técnica de Conservación

En lugar del embalsamamiento convencional, el cuerpo del Papa Francisco ha sido sometido a un 'embalsamamiento transitorio'. Esta técnica, explicada por el experto José Luis Mulero, busca mantener el cuerpo en condiciones adecuadas hasta el momento del entierro, programado para el 26 de abril.

¿En qué consiste el embalsamamiento transitorio? Mulero detalla que se realiza mediante un sistema de inyección mecánica que extrae la sangre y reemplaza los líquidos corporales con productos químicos que inhiben la descomposición.

Desmitificando el Proceso

La clave de este proceso es la extracción de líquidos, los cuales aceleran la descomposición. Al morir, se producen gases que cambian el color del cuerpo. Esta práctica moderna puede retrasar la descomposición por días, semanas o incluso meses, dependiendo de los químicos utilizados.

La Pericia del Embalsamador

Mulero, quien ha trabajado en este campo por años, señala que ha notado que las manos del Papa están algo rígidas, lo que le lleva a considerar que hubiera utilizado más humectantes para dar una imagen serena y natural a los fieles que se acerquen a despedirlo.

El Impacto Emocional del Último Adiós

El objetivo de esta profesión es proporcionar un consuelo a los seres queridos en el último adiós, haciéndolos sentir que sus difuntos parecen simplemente dormidos, alejados del proceso de descomposición. Mulero recuerda con emoción cómo una madre lo abrazó al ver la reconstrucción de su hija pequeña.

Mientras el resto del mundo se prepara para rendir homenaje al Papa Francisco, los expertos en conservación se asegurarán de que su cuerpo permanezca en las mejores condiciones posibles hasta el momento del entierro.