Miryam Benito: Una madre al borde del colapso emocional

Miryam Benito comparte su desgarradora experiencia al descubrir que su hija de 14 años padece depresión y un trastorno de la conducta alimentaria (TCA). Durante el proceso de aceptación, Miryam se enfrentó a su mayor temor: la salud mental de su pequeña.

Los Primeros Indicadores de un Problema Silencioso

Todo comenzó cuando su hija manifestó inquietudes por su físico y sugirió comer menos. "La salud parece ser un tema de preocupación, pero nunca imaginé la profundidad de su sufrimiento", confiesa Miryam. Con el tiempo, la joven empezó a enfermar repetidamente, lo que la llevó a un nutricionista, donde, en un momento revelador, se rompió a llorar y habló por primera vez de su dolor interno.

El Impactante Diagnóstico: Más que un Simple TCA

La especialista fue clara: "Tu hija necesita un psiquiatra, no un nutricionista". Para Miryam, fue una sacudida. La aparente búsqueda de bienestar de su hija se desmoronó al darse cuenta que lo que realmente ocurría era una crisis profunda.

La Urgencia por Ayuda: Una Búsqueda Frenética

Tras el alarmante diagnóstico, la familia se sumergió en la búsqueda de ayuda. La joven repetía que "se quería morir", lo que llevó a Miryam a una lucha constante para protegerla. Buscando apoyo, llegaron al Hospital Infantil Universitario Niño Jesús, donde les dieron pautas para manejar la situación.

De la Infancia al Dolor: El Suceso que Cambió Todo

El diagnóstico reveló que el TCA de su hija estaba vinculado a una historia de bullying durante su infancia. Bullying que la familia había ignorado, pensando que era solo parte del crecimiento. Miryam recuerda cómo, tras cambiar de colegio, su hija se refugió en los estudios, pero el precio fue alto: la presión por el rendimiento escolar la llevó a un oscuro camino.

Superando el Ingreso: La Lucha por la Recuperación

La adolescente pasó 11 días en un centro especializado. Aunque enfrentaron momentos críticos, esta nueva etapa les enseñó el valor del apoyo emocional y educativo. "La recuperación no fue fácil, hubo lágrimas y sufrimiento, pero también avances y esperanza", asegura Miryam.

Un Nuevo Amanecer: La Transformación Familiar

Hoy, la joven inicia una nueva etapa en un tercer colegio y ha comenzado a dejar la medicación. Miryam subraya que una de las partes más sanadoras de este proceso ha sido conectar con otras familias que han atravesado retos similares. Compartir su historia en jornadas sobre el bienestar emocional es ahora su manera de dar voz a quienes aún sufren en silencio.

La Luz al Final del Túnel

"Aunque enfrentamos momentos oscuros, hemos salido más fuertes como familia", concluye Miryam, con un mensaje de esperanza y resiliencia, recordando que no hay padres ni hijos perfectos. Su historia resuena entre aquellos que buscan luz en medio del dolor.