El empresario Víctor de Aldama ha sacudido los cimientos del sistema político español con acusaciones explosivas acerca de sobornos y presuntas corrupciones dentro del Gobierno. Tras varios meses de silencio debido a su situación en prisión preventiva por otra trama criminal, Aldama ha decidido hablar y ha arrojado una serie de acusaciones que podrían tener repercusiones devastadoras.

Durante su reciente declaración ante el juez Ismael Moreno en la Audiencia Nacional, el ex presidente del Zamora CF ha hecho estallar una bomba al confesar que entregó nada menos que 250.000 euros al exministro de Transportes, José Luis Ábalos, y 100.000 euros a su asesor Koldo García. Estas transacciones presuntamente se realizaron durante la crisis de la COVID-19, en medio de la escasez de mascarillas.

Aldama no se detuvo ahí. También reveló que el actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, solicitó conocerlo personalmente para agradecerle por unas gestiones relacionadas con negocios en México. Este encuentro supuestamente sucedió en 2019 durante un acto en Madrid, donde ambos posaron para una fotografía que, según Aldama, fue publicada días atrás por varios medios.

Según sus declaraciones, Aldama se convirtió en un engranaje clave dentro de una red de corrupción que operaba desde el Ministerio de Transportes, sugiriendo que Koldo García actuaba como intermediario entre él y Ábalos. En este contexto, desglosó también otras peticiones de dinero que había recibido para diferentes figuras políticas, incluyendo 25.000 euros para el jefe de gabinete de la ministra María Jesús Montero y 15.000 euros para Santos Cerdán, secretario de Organización del PSOE.

Todo esto ocurre en un ambiente de tensión, ya que la comparecencia de Aldama se produce nueve meses después de la detención de varios implicados en esta supuesta trama, donde el magistrado Moreno le impuso medidas cautelares. Aldama, que durante meses había optado por el silencio, se ha sentido presionado a declarar después de su reciente arresto por otra investigación de fraude de hidrocarburos.

El empresario también tocó un tema candente en sus declaraciones: el aterrizaje de Delcy Rodríguez, vicepresidenta de Venezuela, en Madrid en 2020. Afirmó que el Gobierno estaba al tanto de su llegada y que se habían hecho esfuerzos para facilitar su visita, a pesar de que tenía prohibida la entrada en países de la UE. Esta revelación podría abrir un nuevo frente de cuestionamiento al Gobierno, apuntando a una red de complicidades y encubrimientos.

Las consecuencias de estas declaraciones pueden ser catastróficas. Con Aldama ya en la mira de las autoridades por múltiples delitos, muchas preguntas quedan en el aire. ¿Qué otros secretos oculta el Gobierno? ¿Y quién más está involucrado en esta red de corrupción? La historia apenas comienza, y el audaz testimonio de Aldama promete hacer temblar los cimientos del establishment político español.