Fallece la aclamada hispanista Shirley Mangini, pionera en el estudio de las mujeres en la Segunda República
2024-11-18
Autor: David
Shirley Mangini, una destacada hispanista nacida en Pensilvania en 1946, falleció en octubre de 2024 en su casa de Long Beach, California, donde cumplió su deseo de pasar sus últimos días tras una larga enfermedad.
A lo largo de su carrera, Mangini se convirtió en una figura clave en el estudio de las mujeres de la Segunda República Española. Su obra más reconocida, "Las modernas de Madrid" (2001), se ha consolidado como texto fundamental para investigadores. Sin embargo, a menudo se le ha restado crédito por ser la fuente principal de muchos trabajos que la siguieron. En este libro, Mangini no solo documentó la vida de mujeres intelectuales de la época, sino que también destacó a innumerables mujeres que jugaron un papel crucial en la construcción y defensa de la Segunda República, desde trabajadoras hasta mujeres de clases privilegiadas. Todas ellas fueron valientes y resistieron la opresión del franquismo, enfrentándose a la represión y el olvido.
Su labor investigadora fue minuciosa; realizó entrevistas a mujeres de diferentes contextos y visitó numerosos archivos, dedicando su vida a la recopilación de documentación que compartiría generosamente con quienes la necesitaran, incluidos jóvenes investigadores.
El interés de Mangini por la literatura española comenzó con la generación de los años cincuenta, influenciada por su breve matrimonio con el poeta Ángel González. Tras recibir su licenciatura en la Universidad de Nuevo México, Mangini obtuvo una beca para realizar su maestría en Austin, donde escribió sobre el poeta Jaime Gil de Biedma. Posteriormente, completó su doctorado con una tesis sobre Juan Marsé y comenzó a investigar la intelectualidad antifranquista, culminando en la publicación de "Rojos y rebeldes: La cultura de la disidencia durante el franquismo" (1987).
Como profesora en la California State University, Mangini disfrutó profundamente de su trabajo e investigación, lo que la llevó a realizar la biografía de la pintora Maruja Mallo y a explorar temas que combinaban sus dos pasiones: la gastronomía y la historia de las mujeres intelectuales del siglo XIX y principios del XX. Desafortunadamente, una enfermedad que la afectó en sus últimos años le impidió concluir su estudio sobre la gastronomía de Emilia Pardo Bazán.
Shirley Mangini fue una persona carismática, divertida y valiente, que cultivó amistades entrañables con muchas de sus protagonistas. Sus diarios reflejan su curiosidad y pasión por la vida, así como su conexión con figuras como Rosa Chacel y Victoria Kent. Mangini dejó una huella indeleble en el ámbito académico y en el corazón de quienes la conocieron. Su legado inspira a nuevas generaciones a seguir explorando y reivindicando la historia de las mujeres en España. Ahora más que nunca, su trabajo resuena en los esfuerzos por arrojar luz sobre las contribuciones olvidadas de las mujeres en tiempos de lucha y resistencia.