MADRID, 4 de abril. - Un estudio reciente realizado por expertos de la Universidad de California en Santa Bárbara ha revelado preocupantes hallazgos sobre la relación entre los atracones alimentarios y el consumo excesivo de alcohol.

Utilizando un modelo de comorbilidad en ratones, los investigadores han descubierto que las hembras con antecedentes de atracones comienzan a consumir alcohol en exceso significativamente más rápido que los machos.

En el artículo publicado en 'JNeurosci', los científicos identificaron que estas hembras presentaban niveles elevados de una proteína conocida como fosfodiesterasa 4B (PDE4B), que ha sido previamente relacionada con el trastorno por consumo de alcohol y trastornos alimentarios.

Curiosamente, la inhibición de esta proteína logró prevenir la coexistencia de atracones en ambos sexos de los ratones estudiados.

Este descubrimiento no solo apoya investigaciones anteriores que sugieren un vínculo entre la PDE4B y el consumo problemático de alcohol, sino que también abre la puerta a posibles tratamientos terapéuticos en el futuro.

Los autores del estudio subrayan que su modelo conductual puede ser una herramienta valiosa para investigadores preclínicos que busquen desentrañar los complejos mecanismos que conectan los atracones de comida y el consumo excesivo de alcohol.

La relevancia de estos hallazgos es considerable, ya que tanto los trastornos alimentarios como el abuso de alcohol son problemas de salud pública que afectan a millones de personas en todo el mundo.

La identificación de biomarcadores como la PDE4B podría facilitar intervenciones más focalizadas y efectivas para prevenir y tratar estas afecciones interrelacionadas.

Es fundamental avanzar en la investigación para entender el papel de la genética y la biología detrás de estos comportamientos, así como trabajar en campañas de concienciación que aborden la salud mental y su impacto en la alimentación y el consumo de sustancias.