¿Acabó una guerra termonuclear con la civilización de Marte?

John E. Brandenburg, un físico de Harvard, ha hecho una afirmación sorprendente que está captando la atención mundial: sostiene que una avanzada civilización marciana fue aniquilada por un conflicto nuclear. Según su investigación, la presencia de xenón-129 en la atmósfera marciana sería una prueba del devastador evento.

Evidencias inquietantes de un pasado trágico

Publicada por primera vez en 2011, esta rica teoría ha cobrado vida recientemente en un popular pódcast. Los rastros químicos encontrados en Marte, según Brandenburg, poseen una firma isotópica similar a la de las pruebas nucleares en la Tierra, sugiriendo un cataclismo planetario.

Un isótopo clave: el xenón-129

Brandenburg argumenta que la distribución del xenón-129 en Marte no puede ser explicada por procesos naturales. Jason Reza Jorjani, que respalda esta hipótesis, subraya: "La detonación de una bomba termonuclear deja una huella de xenón-129 inconfundible, exclusiva de ese tipo de explosión". En esta línea, la elevada concentración de este isótopo en el planeta rojo sería evidencia de la extinción de una civilización tecnológicamente avanzada.

La comunidad científica no está convencida

No es de sorprender que la mayoría de la comunidad científica haya rechazado esta teoría novelesca. La NASA ha argumentado que las anomalías en Marte más bien podrían explicarse por la morfología del terreno o impactos de meteoritos, no por explosiones de posible origen humano.

Además, las publicaciones de Brandenburg han tenido escaso impacto en revistas científicas, generando escepticismo entre sus colegas. Hasta la fecha, no se han encontrado estructuras, cráteres o restos que avalen la idea de una guerra nuclear, más allá de conjeturas alimentadas por imágenes satelitales y análisis atmosféricos.

Un dilema fascinante y aterrador

A medida que la exploración del espacio avanza, estas teorías invitan a la reflexión. ¿Qué pasaría si halláramos evidencias de una civilización perdida en Marte? El enigma de la vida en otros planetas continúa siendo uno de los grandes misterios que la humanidad busca resolver.