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Iñaki Williams y Óscar de Marcos alzan la voz contra la violencia en el fútbol tras incidentes con bengalas en Roma

2024-09-27

Autor: Laura

Una imagen impactante se vivió en el Estadio Olímpico de Roma, donde el Athletic Club sacó un empate valioso en su debut en la Europa League. Sin embargo, lo que debería haber sido un día memorable acabó empañado por un comportamiento violento de algunos aficionados. Mientras los bomberos intentaban controlar las llamas, una bengala voló hacia la grada rival, dejando a todos atónitos.

En medio de esta tensa situación, 50 ultras del grupo Herri Norte encendieron bengalas en las primeras filas de la grada visitante. Este grupo, conocido por sus actitudes radicales y su vestimenta negra, se las arregló para exhibir una pancarta prohibida, lo que causó la intervención de la policía italiana. Lo más alarmante llegó en el minuto 64, cuando una bengala impactó cerca de una fotógrafa en la pista de atletismo, y más tarde, otra bengala fue lanzada hacia la afición local, provocando un incendio que requirió la intervención rápida de los bomberos.

Los jugadores del Athletic, en el campo, no podían permanecer ajenos a los hechos. Ander Herrera compartió que instó a Iñaki Williams a comunicarse con los ultras para recordarles que había familias y niños presentes: “Le dije que hablara con ellos y que dijera que esto no es lo que queremos.”

Un mensaje claro: el Athletic Club dice no a la violencia

Tras el partido, el equipo se reunió en el centro del campo para discutir lo sucedido antes de saludar a su afición. Williams y De Marcos decidieron acercarse a la zona de los ultras. “No hay que lanzar bengalas al público. ¡Vamos a dar ejemplo, hostia!”, afirmó Williams, determinando un claro rechazo ante la violencia que presenciaron.

De Marcos añadió que los capitanes se dirigirían a los ultras para reprobar su comportamiento, reafirmando que esto no representa a la verdadera afición del Athletic Club. “Ese comportamiento no representa a la afición del Athletic”, sentenció, recordando que el club y sus valores deben estar por encima de cualquier acto violento.

El entrenador Ernesto Valverde también condenó este tipo de actitudes, insistiendo en que no tienen cabida en el entorno futbolístico. La reacción de los aficionados rojiblancos que llenaban el estadio fue unánime, claro abucheo hacia los que provocaron los disturbios y un aplauso instantáneo hacia los jugadores que defendieron los valores del club.

El Athletic Club, en un comunicado oficial, calificó los incidentes de "intolerables" y "totalmente inaceptables", reafirmando su política de "tolerancia cero" contra cualquier forma de violencia. Este incidente no solo resaltó la necesidad de que el fútbol sea un espacio seguro, sino también de la responsabilidad que tienen los jugadores y la afición para mantener esos valores vivos.