¡Una gran noticia para los aficionados del Valencia CF! El club ha levantado la hipoteca del estadio Mestalla gracias a un préstamo de Goldman Sachs. Este dinero proviene de fondos de inversión estadounidenses que no buscan ganancias rápidas, lo que ha permitido al club utilizar los derechos de televisión y comercialización como avales para garantizar los primeros 121 millones de euros de un total de 186 millones en deuda, eliminando así Mestalla como garantía.

Este préstamo tiene un período de carencia de dos años y el Valencia comenzará a pagar en enero de 2027. La refinanciación ha permitido al club cancelar todos sus préstamos anteriores, incluyendo aquellos que tenían el estadio viejo como respaldo. A pesar de que el interés medio del nuevo préstamo es de 6,23%, que es inferior al de los préstamos anteriores, la gran noticia es la desaparición de la quita que existía desde la compra del club por parte de Peter Lim en 2014.

Con eso, Lim ya no tiene restricciones para vender sus acciones, lo que abre un nuevo capítulo para el Valencia CF. Esta refinanciación no solo incrementa el valor del club para futuros compradores, sino que también lo hace más atractivo, especialmente con la finalización del Nuevo Mestalla a la vista. Después de una década de inversión que ronda los 200 millones de euros, Lim se prepara para un potencial traspaso en un entorno favorable.

Además, el club ha solicitado un préstamo puente de 65 millones de euros a Goldman Sachs, que se liquidará al definir la financiación del nuevo estadio. La nueva deuda, prevista para ser pagada a lo largo de 25 años, se espera que genere ingresos significativos, estimados en 120 millones solo de Mestalla.

Los ingresos del Nou Mestalla se garantizarán con diversas fuentes: abonos, ventas de entradas, acuerdos de naming, eventos y más. Los aficionados al Valencia CF aguardan con entusiasmo el futuro del club, y esta nueva etapa prometedora podría atraer a inversores dispuestos a dar un giro radical al destino del equipo.