Un reciente estudio revela que el principal motivo que impulsa a las mujeres a cuidar su peso está relacionado con la autoestima, mientras que los hombres se enfocan más en mantener su salud cardiovascular. Curiosamente, solo un 3 % de ambos géneros implementa cambios en su estilo de vida para prevenir los diferentes tipos de cáncer asociados con la obesidad.

La "Encuesta sobre el conocimiento y la actitud de los españoles en torno a la obesidad", realizada por Novo Nordisk, ha dejado claro que el 75 % de la población reconoce la obesidad como una enfermedad. Sin embargo, el mismo porcentaje cree que se puede prevenir completamente mediante hábitos saludables.

Mar Malagón, presidenta de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO), ha señalado que la obesidad es una enfermedad multifactorial, afectada por factores genéticos, ambientales, y socioeconómicos. Sorprendentemente, aunque el 83 % de los encuestados opina que el estilo de vida es un factor determinante en el desarrollo de la obesidad, solo un 13 % se mostraría dispuesto a tratarla con medicamentos. En cambio, el deporte (65 %) y las dietas de adelgazamiento (60 %) son las opciones más populares entre los españoles.

Además, la doctora Malagón ha apuntado que los pacientes frecuentemente sienten un estigma asociado a la obesidad, lo cual puede hacer que eviten buscar tratamiento para evitar ser juzgados, incluso por los profesionales de la salud. Esto es alarmante considerando que la obesidad puede conducir a más de 200 comorbilidades, siendo las enfermedades cardiovasculares la principal preocupación de un 33 % de los encuestados.

Los motivos emocionales para cuidar el peso son más pronunciados entre las mujeres (34 %), superando la preocupación por la salud cardiovascular (20 %). En hombres, la salud del corazón es lo que más les motiva (33 %). Además, cerca de dos tercios de los participantes confirmaron que su estado de ánimo se ve afectado significativamente por su peso, especialmente las mujeres jóvenes entre 18 a 29 años (84 %).

Un dato que no se puede pasar por alto es que la menopausia tiene un impacto directo en el peso femenino. Ocho de cada diez encuestadas admiten haber superado su peso ideal en algún momento. Sin embargo, curiosamente, un 20 % no tiene claro cuál sería el peso saludable.

La presidenta de SEEDO insiste en la importancia de abordar la obesidad desde un enfoque multidisciplinario, abarcando Atención Primaria hasta nutrición y salud mental, para un tratamiento más efectivo de esta creciente epidemia. Además, reclama que tanto los tratamientos como los nuevos medicamentos basados en semaglutida deben ser accesibles y financiados por el sistema de salud pública, ya que la falta de acceso es calificada como "una injusticia".

Descubre cómo tus hábitos pueden mejorar tu salud y autoestima. ¡No te quedes atrás!