Tecnología

¡Increíble pero cierto! Cuida su siesta mientras su Tesla conduce solo a ciegas

2024-10-15

Autor: Manuel

Una cosa es ser un ferviente defensor de Tesla y de las innovaciones de Elon Musk, y otra muy distinta es poner en riesgo la vida propia y la de los demás por ignorancia y despreocupación.

Recientemente, se reportó un caso en Estados Unidos que ilustra este dilema. Un dueño de un Tesla Model 3 decidió cubrir el parabrisas y las ventanillas laterales de su auto para evitar que el sol le molestara mientras el coche, supuestamente, lo transportaba solo. La razón parece ser que buscaba disfrutar de una merecida siesta en plena carretera.

Es importante señalar que, aunque Tesla cuenta con el sistema Autopilot, este no es un sistema de conducción autónoma total. Los modelos actuales pueden adaptar su velocidad al tráfico, frenar ante obstáculos y reconocer semáforos y señales, pero todavía requieren que el conductor mantenga las manos en el volante y la vista en la carretera. En términos técnicos, esto significa que el conductor está a bordo de un sistema de nivel 2 de autonomía, no de un nivel 4, lo que hace que la decisión del conductor de relajar sus obligaciones mientras 'deja conducir' a su Tesla sea nada menos que temeraria.

Un video publicado en Reddit documenta este insólito comportamiento. En la grabación, el Tesla navega por una concurrida autopista californiana, usando el intermitente para realizar un arriesgado adelantamiento por la derecha a un Toyota Prius. Después, el vehículo vuelve a su carril original, a pesar de que el conductor había cubierto sus ventanillas con periódicos, en un intento de bloquear la luz solar.

Este tipo de escenas no solo plantea serias preguntas sobre la percepción de la tecnología de conducción autónoma, sino que también tiene implicaciones sobre la seguridad vial. Expertos en la materia advierten que los conductores deben ser conscientes de que ni siquiera los sistemas más avanzados son una excusa para descuidar la atención en la carretera. Si bien la tecnología está avanzando, cada vez hay más voces que abogan por un período de educación y normativa más estricta para los usuarios de estos vehículos.

La pregunta que queda en el aire es: ¿Hasta dónde llegará la imprudencia en nombre de la comodidad tecnológica? ¡El futuro de la conducción autónoma depende de ello!