Increíble hazaña científica en Memphis

Jackson Oswalt, un prodigio de apenas 12 años, ha hecho historia en la ciudad de Memphis, EE. UU., al convertirse en el más joven del mundo en realizar un experimento de fusión nuclear... ¡desde su propia habitación!

Con una curiosidad insaciable por la ciencia y desencantado de los videojuegos que no ofrecen un legado duradero, Jackson tomó una decisión audaz. "Me di cuenta de que podía ser el mejor en cualquier videojuego, pero eso no tendría un gran impacto", comentó el chico que ahora es la sensación del momento.

De la teoría a la práctica: el impresionante proyecto

No se contentó solo con mirar videos en YouTube; se lanzó a la acción. Desarrolló un "fusor de demostración", un dispositivo capaz de generar plasma sin alcanzar la fusión completa. Para ello, el joven utilizó su ingenio y reunir un complejo mecanismo que incluía una cámara de vacío, una bomba de vacío, un transformador de neón y un convertidor casero.

Su proyecto no solo le ganó el reconocimiento en una feria científica escolar, sino que también llamó la atención de las autoridades.

La inesperada visita del FBI

Después de completar su innovador dispositivo, Jackson jamás imaginó que su curiosidad científica atraería la atención del FBI. La preocupación por los posibles riesgos de radiación derivados de su experimento llevó a la organización a presentarse en su puerta.

Equipados con un contador Geiger para medir la radiactividad, los agentes verificaron minuciosamente si los experimentos del joven representaban una amenaza. Afortunadamente, todo resultó estar en orden, pero este extraño encuentro con el FBI subraya lo arriesgado y sorprendente que puede ser el mundo de la ciencia.

Un futuro brillante para el joven científico

Jackson Oswalt no solo ha demostrado que con pasión y curiosidad se pueden lograr grandes cosas, sino que también se ha convertido en un ícono para jóvenes inventores y científicos en todo el mundo. ¡Quién sabe lo que este talentoso chico será capaz de descubrir en el futuro!