La esperada actuación de Aitana en el Estadio Santiago Bernabéu, programada para junio, ha sido cancelada oficialmente, dejando a sus seguidores sorprendentemente descontentos. La famosa cantante ha anunciado que se presentará en el Estadio Metropolitano los días 30 y 31 de julio, pero este cambio ha desatado una avalancha de críticas por parte de sus incondicionales, muchos de los cuales se sienten decepcionados y, en algunos casos, engañados por la situación.

Después de meses de planificación y negociaciones complicadas, ni el club de fútbol Real Madrid ni el equipo de la artista pudieron llegar a un acuerdo para llevar a cabo el evento. En un conmovedor mensaje a sus fans, Aitana compartió en redes sociales: "Me he desvivido hasta el último minuto, pero hay cosas que no están en mi mano". Subrayó que estaba buscando una solución alternativa para que las actuaciones no fueran canceladas por completo.

La reacción de algunos seguidores ha sido feroz, expresando su frustración por la pérdida de dinero en reservas de hoteles y transporte. Un fan indignado comentaba en redes: "¿Qué pasa con los billetes de tren y los hoteles?" mientras que otro usuario, con ironía, decía: "Lo de Aitana y su equipo es para aplaudir". La ira ha brotado en plataformas como X (anteriormente Twitter), donde los seguidores no han dudado en criticar la falta de organización: "Aitana ha hecho perder tiempo y dinero a sus fans, es normal que estén enfadados".

La cantante, visiblemente afectada, prometió ofrecer el mejor espectáculo posible. Su equipo de trabajo también ha informado que las entradas ya compradas seguirán siendo válidas, y que se enviarán nuevamente con los códigos QR actualizados. Aquellos que no puedan asistir podrán solicitar la devolución de su dinero a partir del 23 de abril.

Además de cambiar de estadio, Aitana ahora tiene el desafío de llenar de nuevo dos noches en un venue tan grande como el Metropolitano. Este revés no solo representa un reto logístico, sino también emocional, después de haber recibido una lluvia de críticas que podría complicar su relación con una parte de su fiel fandom. La cantante ha demostrado ser una de las figuras más destacadas del pop nacional, y ahora se enfrenta a la presión de salir adelante a pesar de la tormenta que ha generado esta controversia.