Evitar sufrir de una enfermedad neurológica se está convirtiendo en una hazaña casi imposible. Según la Sociedad Española de Neurología (SEN), alrededor de una de cada tres personas enfrentará alguna afección neurológica a lo largo de su vida. Lo que es aún más preocupante es que la prevalencia de estas enfermedades en España se encuentra un 18% por encima de la media mundial. ¿Qué está detrás de este alarmante dato?

El doctor Javier Camiña, neurocirujano y vocal de la SEN, explica que la principal causa de esta discrepancia radica en el envejecimiento poblacional. "La pirámide poblacional en España muestra una mayor esperanza de vida y, por lo tanto, una proporción más alta de personas mayores, en comparación con otros países", señala Camiña.

Cuando se compara con naciones de nuestro entorno, la diferencia es de un 1,8% en prevalencia. Sin embargo, la brecha es mucho mayor si se observa a países centroafricanos, donde la población es significativamente más joven y carece de la misma infraestructura diagnóstica que nosotros.

Un estudio reciente titulado "Impacto sociosanitario de las enfermedades neurológicas en España" revela que entre 21 y 23 millones de personas en España padecen algún trastorno neurológico, afectando tanto a ancianos como a jóvenes.

Surge la pregunta: ¿existen diferencias según el sexo en la prevalencia de estas enfermedades? Camiña indica que las mujeres, en todas las etapas de la vida, muestran una mayor prevalencia. En el informe se destaca que en la edad avanzada, las mujeres tienen más riesgo de sufrir ictus y enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.

Sin embargo, las jóvenes también no están exentas de riesgos, siendo la migraña una afección más común entre ellas. Camiña menciona que los cambios hormonales juegan un papel crucial en esta incidencia, afectando tanto el desarrollo como la frecuencia y síntomas de las migrañas y los ictus.

Con respecto a la menopausia, el doctor sugiere que hay una acumulación de factores que deterioran la calidad de vida, entre ellos, problemas metabólicos y osteoporosis, lo que aumenta la fragilidad en las mujeres.

El informe de la SEN resalta que las enfermedades neurológicas son responsables del 19% de la mortalidad en España. Sorprendentemente, en las mujeres, constituyen la principal causa de fallecimiento. Sin embargo, Camiña también agrega un mensaje esperanzador: "En la última década, la mejora en la atención y el tratamiento ha llevado a un mejor pronóstico. Hoy en día, la mortalidad ha disminuido en comparación con hace diez años. Aproximadamente el 50% de los pacientes que sufren un ictus logran recuperar su calidad de vida, y se ha reducido significativamente el número de personas que sufren secuelas permanentes o mueren a causa de estas afecciones".

La preocupación por la salud neurológica en España es apremiante, pero hay avances que nos dan razones para ser optimistas. Es crucial seguir investigando y mejorando la atención neurológica para enfrentar este reto de salud pública.