Quince segundos del Eurovisión Junior 2024, que se celebra en la Caja Mágica de Madrid, reflejan una transformación significativa en el panorama del fútbol femenino. Durante la gala, se realizó un homenaje simbólico a nuestras futbolistas, evidenciando que su avance en la sociedad es ya irreversible. Este evento no se limitó a ser un simple reconocimiento; es un testimonio de que el fútbol femenino ha permeado en la vida cotidiana de España.

Los presentadores Ruth Lorenzo y Marc Clotet, en un tono ameno y en inglés, abordaron algunos de los clichés que Europa asocia con la cultura española, diciendo que muchos creen que solo nos dedicamos a dormir la siesta o bailar flamenco. Lorenzo acotó con humor: "No puedo negar que una buena paella es irresistible". Este intercambio ligero sirvió como un puente hacia la celebración del fútbol, con Melani García, una de las presentadoras más jóvenes, luciendo la camiseta de la Selección española y resaltando la importancia del fútbol en nuestra identidad nacional.

"Chicos, es así. Estamos orgullosos de tener a dos de las mejores jugadoras de la historia: Aitana Bonmatí y Alexia Putellas", anunció Melani, despertando un ruidoso aplauso entre el público y transformando el ambiente en una fiesta antes de la actuación de Francia. La transmisión televisiva incluso centró su atención en un aficionado que portaba un cartón de Alexia Putellas, auténtico símbolo del reconocimiento actual que gran parte de la sociedad le otorga a nuestras futbolistas.

Más allá de ser un simple acto festivo, esta celebración en Eurovisión Junior estuvo cargada de simbolismo. En un año en el que la selección masculina ha conquistado la Eurocopa y los Juegos Olímpicos, la elección de resaltar la grandeza de las jugadoras refleja la creciente visibilidad y la equidad en el deporte. Las leyendas del fútbol español masculino, como Nico Williams y Rodri, se vieron eclipsadas por la figura de Putellas y Bonmatí, dejando claro que ellas son íconos igualmente relevantes para la juventud presente en el evento.

Alexia y Aitana no solo representan a sus clubes y a la selección; se han convertido en modelos a seguir para las nuevas generaciones. Su inclusión en un evento tan mundialmente reconocido como Eurovisión Junior señala un cambio de paradigma, sugiriendo que, en un futuro cercano, el panorama del deporte femenino podría ser aún más brillante. La presencia de estos íconos deportivos en el festival resalta la necesidad de dar más espacio y reconocimiento a las mujeres en todas las esferas de la vida, mostrándonos que el fútbol femenino ha venido para quedarse y en grande.