Un obstáculo inesperado en el camino de Avalon

A veces, el destino te lanza desafíos inesperados, y en Gijón, la bocatería Avalon lo sabe muy bien. Desde hace dos meses, un andamio ha invadido la fachada de su local, robándole visibilidad y, con ello, parte de su clientela.

La reacción de María: humor y resiliencia

María, la dueña de Avalon desde hace cuatro meses, ha decidido enfrentar esta situación con una buena dosis de humor. En sus publicaciones en TikTok (@avalon.gijon), comparte la frustración que siente por no ser vista en medio de esta obra. 'Este andamio no solo tapa nuestra vista, sino también nuestra alegría y varios clientes', comenta entre risas.

Un llamado al Ayuntamiento por visibilidad

Con ingenio, María ha pedido al Ayuntamiento que le ponga una lona con el nombre de la bocatería, al igual que ha hecho con otros comercios de la zona. Hasta el momento, su solicitud ha caído en saco roto, dejando a Avalon en una lucha visual en medio de la calle.

¿Cómo afecta esto a su negocio?

Mientras María comparte su historia con una sonrisa, el impacto en su negocio es palpable. La disminución en el flujo de clientes podría ser un duro golpe para cualquier emprendedor, pero ella se niega a dejar que este andamio apague su espíritu.

El espíritu de comunidad y la esperanza

Los seguidores de María en redes sociales han comenzado a responder, apoyando su negocio y sumándose a la causa. La comunidad está empezando a darse cuenta de que en estos momentos difíciles, la unión puede marcar la diferencia.

Una historia que sigue en desarrollo

Este relato no es solo sobre un andamio, sino sobre la perseverancia y la capacidad de adaptarse a los cambios. A medida que Avalon continúa su lucha, todos estaremos atentos a cómo se desarrolla esta historia en Gijón.