Mundo

La financiación climática de la COP29: ¡Las cifras que podrían cambiar el futuro del planeta!

2024-11-16

Autor: Marta

A medida que los líderes mundiales continúan las discusiones en la COP29 en Bakú, la necesidad urgente de una financiación climática sustancial se hace cada vez más evidente. Los negociadores reconocen que los países de ingresos bajos requieren apoyo significativo para adaptarse a los intensificados efectos del cambio climático. Sin embargo, el debate persiste sobre quién debe asumir esta responsabilidad financiera, lo que ha generado tensiones entre las naciones desarrolladas y en desarrollo.

El nuevo objetivo de financiación climática busca reemplazar la meta anual de 100.000 millones de dólares (95.000 millones de euros) establecida en 2009, que apenas se alcanzó en 2022 con un retraso de dos años. Con proyecciones que sugieren que se requerirán billones de dólares, el desafío no es menor. Un informe de la Iniciativa de Política Climática reveló que la financiación global para el clima alcanzó aproximadamente 1,3 billones de dólares (1,2 billones de euros) en 2021/2022, un aumento significativo respecto a los 653.000 millones de dólares (619.000 millones de euros) de 2019/2020. Sin embargo, otras organizaciones elevan la cifra necesaria a 1 billón de dólares (948.000 millones de euros) por año.

Los expertos advierten que para 2030, la financiación climática necesaria podría escalar hasta 9 billones de dólares (8,5 billones de euros). Esta enorme necesidad financiera está llevando a los gobiernos a explorar soluciones creativas, como impuestos sobre el patrimonio y nuevos gravámenes en el transporte marítimo.

Mientras tanto, los grandes bancos internacionales, impulsados por recursos de los contribuyentes, han emergido como los principales proveedores de financiación climática para las naciones en desarrollo. Estos bancos desempeñaron un papel crucial para que el mundo llegara a cumplir el objetivo de 100.000 millones de dólares anuales acordado en 2009, aunque la rapidez y eficacia de su actuación siguen siendo cuestionadas.

Un estudio del Grupo Independiente de Expertos de Alto Nivel sobre Financiación Climática pronostica que los países en desarrollo, excluyendo a China, necesitarán 2,4 billones de dólares (2,3 billones de euros) anuales para inversiones climáticas en apenas siete años.

El Banco Mundial reportó una inversión de 42.600 millones de dólares (40.400 millones de euros) en su último ejercicio fiscal, un incremento del 10% respecto al año anterior. Sin embargo, la dependencia de los países en desarrollo de estos bancos es mucho más pronunciada que la de los países industrializados, donde el financiamiento privado es más accesible. En comparación, los prestamistas privados solo aportaron el 7% de toda financiación climática en África subsahariana, reflejando así el difícil acceso a tasas de interés bajas que enfrentan estas naciones.

Mientras las naciones desarrolladas, incluyendo a los Estados Unidos y la Unión Europea, reconocen que se requieren billones para inversiones climáticas, todavía no se ha fijado un objetivo claro para la ayuda financiera internacional. La pregunta que queda es: ¿Están realmente preparados para asumir esta responsabilidad y cambiar el destino del planeta? ¡El tiempo se agota!