El BCE Enfrenta una Decisión Crucial

Este jueves, el Banco Central Europeo (BCE) se prepara para una de sus reuniones de política monetaria más esperadas en meses. La guerra comercial iniciada por Estados Unidos ha generado una nube de incertidumbre sobre la economía global, especialmente en Europa. Los analistas apuntan a un recorte inminente de 25 puntos básicos, similar al que se realizó en marzo, donde el precio del dinero se estableció en el 2,5%.

Impacto Directo en las Hipotecas

Si se confirman estas expectativas, los tipos de interés bajarían a un 2,25%, ampliando aún más la brecha con la Reserva Federal estadounidense, que se mantiene entre el 4,25% y el 4,5%. Este recorte afectará de inmediato a los costos de financiación, manteniendo a las familias españolas en un estado de expectación. Un nuevo descenso podría incrementar la presión sobre los préstamos hipotecarios, tanto para nuevos créditos como para aquellos ya firmados referenciados al euríbor.

El Euríbor en Mínimos Históricos

El euríbor a 12 meses ha caído recientemente por debajo del 2,2%, situándose en un 2,167%, su nivel más bajo desde septiembre de 2022. Santiago Carbó, director del área financiera de Funcas, advierte que, aunque el índice sigue a la baja, lo hace a un ritmo más lento. Este titubeo ocurre en un contexto complicado de creciente proteccionismo, lo que ha abierto la puerta a una revisión de los tipos, inicialmente esperados en torno al 2%.

Las Declaraciones Clave de Christine Lagarde

Los mensajes que emita Christine Lagarde, presidenta del BCE, en la conferencia de prensa de este jueves, serán cruciales en medio de este panorama incierto. Gilles Moëc, economista jefe en AXA, sugiere que el BCE está preparado para actuar con firmeza según lo requiera la situación actual. Mientras tanto, en EE. UU., la Reserva Federal ha instado a mantener la calma, asegurando que está lista para intervenir si es necesario.

La Eurozona en la Cuerda Floja

Los temores acerca de una guerra comercial han debilitado las esperanzas de una recuperación económica sostenida en la eurozona para 2025. A pesar del optimismo inicial por el estímulo fiscal en Alemania, este ha sido rápidamente reemplazado por temores de un colapso en la demanda regional. Además, el euro se sitúa actualmente en 1,12 dólares, lo que podría ayudar a reducir la presión inflacionaria en Europa. Desde ING argumentan que, al menos verbalmente, el BCE podría abrir la puerta a una política monetaria más acomodaticia.