
La hija de Tom Hanks desvela secretos impactantes de su infancia 'marcada por la violencia y la pobreza'
2025-04-04
Autor: Ana
Elizabeth Hanks, la hija del icónico actor Tom Hanks, ha dado voz a sus experiencias traumáticas en su nueva autobiografía, The 10: A Memoir of Family and the Open Road. En este conmovedor relato, EA, como le llaman, revela la compleja relación que mantuvo con su madre, Samantha Lewes, y cómo la separación de sus padres en 1985 arrastró a su familia a un torbellino de carencias y violencia.
"Soy una niña del primer matrimonio [menos conocido]", comparte Elizabeth en un extracto publicado por la revista People. A los 42 años, ella recuerda con tristeza cómo sus momentos familiares se limitaban a raras ocasiones, como la graduación de su hermano Colin y la suya propia. "La única foto en la que estamos todos juntos muestra a mi madre con la peluca un poco torcida", añade con un toque de nostalgia.
Después del divorcio, Samantha se llevó a sus hijos a vivir a Sacramento, California, distanciándose de Tom Hanks, quien más tarde se casó con la actriz Rita Wilson en 1988, un año después de su separación. Juntos, tuvieron dos hijos, Truman y Chet, quienes también han enfrentado desafíos en su relación con sus padres. Elizabeth revela que, aunque pasaba los fines de semana y veranos con su padre y madrastra, los años entre los cinco y los 14 estuvieron marcados por la confusión y el miedo. "Fui una chica de Sacramento", revela, aludiendo a una infancia difícil.
Eran tiempos de contrastes: "Vivíamos en una casa blanca con columnas y una piscina, pero la realidad detrás de estas paredes era muy diferente". Su vida se volvió aún más complicada cuando la salud mental de su madre comenzó a deteriorarse gravemente. "El patio trasero se llenó de excrementos de perro, y la casa comenzó a oler a humo", recuerda con dolor. Elizabeth también narra que la nevera casi siempre estaba vacía o contenía alimentos en mal estado, y que su madre pasaba la mayor parte del tiempo en su cama, aislada y leyendo la Biblia.
Un episodio decisivo en su vida fue el momento en que la violencia emocional de su madre se tornó física. "Esa noche, todo cambió y tuve que mudarme a Los Ángeles, justo cuando iniciaba el séptimo grado", escribe. Este cambio forzó una nueva dinámica en el acuerdo de custodia, llevándola a vivir con su padre y a ver a su madre solo los fines de semana. Elizabeth revela que sospecha que su madre padecía un trastorno bipolar no diagnosticado, lo que agrava el dolor de sus memorias.
La historia de Elizabeth no solo es un relato personal, sino también una reflexión profunda sobre el impacto de la violencia y la salud mental en las familias, un tema que sigue siendo relevante en la sociedad actual. ¿Estamos realmente prestando la atención necesaria a estas cuestiones dentro de nuestro entorno familiar? Su libro promete abrir un debate crucial.