Salud

¡La medicina de laboratorio y su papel crucial en el síndrome de Cushing!

2025-04-07

Autor: Laura

MADRID, 7 Abr. - La Sociedad Española de Medicina de Laboratorio (SEMEDLAB) ha puesto de relieve la importancia vital de la medicina de laboratorio en la detección y manejo del síndrome de Cushing, un trastorno endocrino complejo que se caracteriza por la producción excesiva de cortisol o hipercortisolismo. Esto resalta un desafío y una oportunidad en el ámbito de la salud pública.

El diagnóstico del síndrome de Cushing puede resultar extremadamente complicado, debido a las múltiples y a menudo inespecíficas manifestaciones clínicas asociadas. Estas pueden confundirse con otras condiciones comunes, tales como la obesidad, trastornos metabólicos, irregularidades menstruales y problemas psiquiátricos, lo que puede llevar a demoras en el tratamiento adecuado.

Durante las Jornadas del Comité Científico que se celebrarán los días 11 y 12 de abril en Málag, SEMEDLAB se enfocará en profundizar el papel del especialista de laboratorio en el proceso diagnóstico del síndrome de Cushing. El curso titulado 'El síndrome de Cushing, el gran simulador: un reto diagnóstico para el laboratorio', contará con la participación de expertos en medicina de laboratorio, endocrinología, bioquímica clínica y genética molecular que se unirán para desentrañar las causas subyacentes del hipercortisolismo.

El jefe de sección del Laboratorio Core del Complejo Universitario de Vigo, Elías Álvarez, ha enfatizado la necesidad crítica de realizar pruebas bioquímicas para confirmar el diagnóstico del síndrome de Cushing. Un enfoque proactivo implica el cribado en poblaciones amplias, que pueden incluir sujetos que presentan pocas o ninguna sintomatología, como en el caso de los incidentalomas adrenales. Esto subraya la importancia de la detección temprana, que puede salvar vidas.

Álvarez ha declarado que el experto en medicina de laboratorio es esencial en el proceso, desde el diagnóstico del hipercortisolismo hasta la identificación de su causa, lo que permite seleccionar la mejor estrategia terapéutica y seguimiento del paciente. La colaboración multidisciplinar es clave en este contexto; los especialistas de laboratorio deben ser parte integral de los equipos dedicados a la atención de pacientes, trabajando codo a codo con endocrinólogos, radiólogos, cirujanos y patologistas para ofrecer un enfoque holístico.

Uno de los métodos iniciales para confirmar la secreción autónoma de cortisol es la medición en orina durante 24 horas. Patricia Fernández, experta de la Comisión de Hormonas de SEMEDLAB y residente en la Clínica Universidad de Navarra, ha explicado que esta prueba se utiliza para evaluar la cantidad total de cortisol excretado. Además, menciona que la prueba de supresión con dexametasona y la medición de cortisol salival nocturno son también críticas debido al ritmo circadiano del cortisol.

Es crucial la medición de la hormona adrenocorticotrópica (ACTH), ya que ayuda a diferenciar entre el síndrome de Cushing dependiente e independiente de ACTH, lo que a su vez orienta el diagnóstico. Las pruebas de estimulación con la hormona liberadora de corticotropina pueden ser realizadas para distinguir entre un adenoma hipofisario y un tumor ectópico productor de ACTH. Finalmente, las pruebas de imagen, como las resonancias magnéticas y tomografías computarizadas, juegan un papel fundamental al localizar la fuente del hipercortisolismo y evaluar la presencia de tumores.

Hoy más que nunca, el enfoque multidisciplinario y la participación activa de los expertos en medicina de laboratorio son esenciales para el manejo eficaz del síndrome de Cushing. La detección y el tratamiento a tiempo no solo mejoran la calidad de vida de los pacientes, sino que también representan un avance significativo en la lucha contra las enfermedades endocrinas.