
La película que llevó a Sean Connery a abandonar Hollywood para siempre
2025-04-05
Autor: Carmen
Sean Connery, el emblemático actor escocés que dejó su legado en el mundo del cine con más de cinco décadas de contribuciones, ha sido recordado no solo por su inconfundible interpretación de James Bond, sino también por su elegante desempeño en películas como Los Intocables. Connery, fallecido en 2020, es considerado uno de los actores más carismáticos e influyentes en la historia de Hollywood.
Su ascenso a la fama comenzó en 1962 con Dr. No, la primera película oficial de la famosa franquicia de James Bond, donde estableció el estándar para el agente 007 con su mezcla de sofisticación y dureza. A lo largo de su carrera, Connery interpretó a Bond en siete entregas, incluyendo clásicos como Goldfinger y Desde Rusia con Amor, que son considerados pilares del cine de espionaje.
A pesar de su éxito rotundo, Connery nunca se limitó a un solo tipo de papel. En 1987, ganó un Óscar como Mejor Actor de Reparto por su destacada actuación en Los Intocables, donde compartió créditos con actores de renombre como Kevin Costner y Robert De Niro. Sin embargo, su trayectoria en la industria encuentra un giro drástico debido a una película en particular: The League of Extraordinary Gentlemen, que lo llevó a tomar la decisión de retirarse de la actuación.
Estrenada en 2003, esta adaptación de la novela gráfica de Alan Moore y Kevin O'Neill prometía una historia épica de aventuras victoriana, donde Connery encarnó a Allan Quatermain. Sin embargo, el rodaje fue una auténtica pesadilla, marcada por desastres naturales, problemas técnicos, y tensiones insalvables con el director Stephen Norrington. Durante el rodaje en Praga, la ciudad sufrió una devastadora inundación que causó estragos en los sets de filmación, dañando propiedades y retrasando considerablemente el proyecto.
Esta catástrofe natural fue solo el principio de las complicaciones. La relación de Connery con Norrington se volvió tensa, con constantes desacuerdos sobre la dirección creativa de la película. Se dice que el rodaje fue tan insoportable que Connery llegó a involucrarse en la edición final, llegando a criticar fuertemente a Norrington en entrevistas posteriores. El resultado final fue un filme que, aunque recaudó 179.2 millones de dólares a nivel mundial, fue vapuleado por la crítica, con un puntaje decepcionante del 17% en Rotten Tomatoes.
Desilusionado y frustrado por su experiencia en The League of Extraordinary Gentlemen, Connery anunció su retiro oficial en 2006, citando su mala experiencia durante la filmación como un catalizador en su decisión. "Fue una pesadilla. La experiencia tuvo una gran influencia en mí; me hizo reflexionar sobre el mundo del espectáculo. Estoy harto de tratar con idiotas", expresó en una entrevista con The Times.
Para muchos, la decisión de Connery de abandonar el cine fue un golpe significativo, no solo por su legado como actor, sino porque marcó el fin de una era. Aunque algunos podrían haberlo considerado una sobre reacción, la realidad es que no se le volvió a ver en ninguna producción después de un proyecto que prometía, pero que resultó ser un verdadero fiasco en su carrera.