Las violaciones del alto el fuego entre Líbano e Israel: ¿El fin de la tregua?
2024-11-29
Autor: Laura
La euforia inicial tras el acuerdo de alto el fuego se desvanece rápidamente. Aunque los cielos libaneses están en silencio y los drones israelíes no surcan la mayoría del territorio, eso no significa que todo esté bajo control. En la segunda jornada de la tregua decretada el miércoles, ya se han reportado las primeras violaciones del acuerdo. Tanto Líbano como Israel se acusan mutuamente de romper la paz prometida. Aunque estos eventos podrían considerarse anecdóticos, el primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, no ha tardado en lanzar amenazas a Hizbolá, advirtiendo de una 'guerra intensiva' si se produce alguna violación del alto el fuego.
Uno de los puntos clave del acuerdo es el despliegue del Ejército libanés en el sur del país, considerado como la única fuerza autorizada a portar armas en la zona. Cientos de soldados han llegado a aldeas del sur, donde la población, a pesar del riesgo y la devastación, les ha recibido con vítores y flores. Sin embargo, las Fuerzas Armadas Libanesas han denunciado violaciones del alto el fuego por parte de Israel.
Las autoridades militares libanesas publicaron en X que 'los días 27 y 28 de noviembre, tras la declaración del alto el fuego, el enemigo israelí violó el acuerdo varias veces con ataques aéreos y disparos dirigidos a territorio libanés'. El primer ataque aéreo se registró cerca de Baysariyah, al norte del río Litani. El acuerdo estipula que se deben desmantelar las instalaciones militares no autorizadas al sur del río Litani, aunque no menciona nada sobre las ubicadas al norte.
Desde la perspectiva israelí, el Ejército justificó el ataque aéreo afirmando haber detectado 'actividad terrorista en una instalación de Hizbolá que contenía cohetes de mediano alcance'. Pero el fuego ha alcanzado a civiles: horas antes, las fuerzas israelíes confirmaron haber disparado contra personas que intentaban regresar al sur. A pesar de las promesas de paz, muchas familias libanesas que fueron desplazadas por la invasión del 1 de octubre todavía no han podido volver a sus hogares. Este jueves, se reportaron incidentes en Rmeish, una aldea predominantemente cristiana.
La situación es alarmante. Dos periodistas resultaron heridos intentando cubrir la situación en Khiam, a seis kilómetros de la frontera, y el Ejército israelí detuvo a cuatro personas, que según ellos estarían vinculadas a Hizbolá, aunque se afirma que son civiles. Este viernes, se informó que una fuerza israelí ingresó a un barrio de Khiam, que había sido escenario de violencia, lo que ha generado más tensiones.
Por si fuera poco, los ataques israelíes han golpeado también a centros médicos. Este mismo viernes, disparos alcanzaron el Hospital Ghandour en Bint Jbeil, provocando al menos un herido más. A pesar de la violencia, no se han reportado disparos de cohetes desde Hizbolá hacia el norte de Israel, lo que ha llevado a algunos a contemplar su regreso como una posibilidad.
Sin embargo, muchas personas siguen dudando de la estabilidad de la tregua. Antoine Khoury, un joven de Líbano, expresó: 'Aunque las bombas hayan parado, estamos condenados a la guerra perpetua'. Su visión refleja una realidad difícil para el país, que ha vivido conflictos con Israel cada 10 o 15 años, perdiendo vidas y territorios continuamente. La situación en la frontera sigue siendo crítica, y la paz parece un horizonte lejano mientras las tensiones persisten.