Madrid ha puesto en marcha una ambiciosa estrategia para atraer inversiones del gigante asiático, ofreciendo un entorno favorable que incluye bajos impuestos, estabilidad política y una burocracia ágil. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se encuentra actualmente en Corea del Sur buscando oportunidades para expandir la inversión en la región.

Durante su visita, Ayuso ha declarado que los inversores surcoreanos demandan "más flexibilidad, menos impuestos y mayores facilidades" para facilitar la inversión. Esta es una señal clara de que Madrid está dispuesta a adaptarse a las necesidades de los inversores internacionales.

Desde 1993, Madrid ha recibido casi 900 millones de euros en inversiones provenientes de Corea del Sur, lo que representa el 56,4% del total de las inversiones coreanas en España. Sin embargo, el objetivo de la presidenta es aumentar aún más esta cifra, especialmente destacando tres proyectos clave: la Ciudad de la Justicia, la Ciudad de la Salud y el desarrollo de Madrid Nuevo Norte, que promete revitalizar y transformar vastos sectores de la capital.

El proyecto de la Ciudad de la Justicia tiene como objetivo centralizar todos los servicios judiciales en un solo lugar, mejorando así la eficiencia y la accesibilidad. La Ciudad de la Salud se propone crear un entorno de atención médica de vanguardia, impulsando la investigación y mejorando los servicios sanitarios para todos. Por otro lado, Madrid Nuevo Norte es un proyecto urbanístico que busca desarrollar un nuevo centro de negocios y residencias, integrando espacios verdes y promoviendo un estilo de vida sostenible.

Con estos proyectos, Madrid pretende consolidarse no solo como un destino turístico, sino como un hub atractivo para la inversión internacional, destacando su capacidad para ofrecer un ambiente favorable a los negocios. La combinación de estos factores puede resultar en un crecimiento significativo de la inversión surcoreana, beneficiando tanto a la economía madrileña como a las empresas locales.