Milagrosa Olmedo ha sido cesada de su puesto como decana de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Granada en Ceuta mediante una moción de censura impulsada por la Junta de Facultad. Esta decisión, que ha sorprendido a muchos, se hizo efectiva el 12 de marzo, y parece que las discrepancias sobre su gestión y su estilo de liderazgo fueron las principales razones detrás de esta medida. Aunque no se han divulgado detalles específicos sobre el proceso, la situación ha generado un intenso debate en la comunidad académica.

La ya exdecana ha optado por no comentar la situación públicamente, a pesar de que muchos medios han intentado obtener su versión. Con su salida, la Facultad se encuentra actualmente sin una dirección titular, lo que ha llevado a la convocatoria de elecciones anticipadas programadas para el próximo lunes 7 de abril.

Olmedo asumió el cargo en 2018, convirtiéndose en la primera mujer en liderar la Facultad de Ciencias de la Salud en nuestra ciudad y sucediendo a Jesús Ramírez. Durante su mandato, se propuso elevar el prestigio de la facultad mediante diversas iniciativas y proyectos.

En una nota positiva, cabe mencionar que el 7 de marzo, apenas unos días antes de su destitución, Olmedo recibió el Premio Centro de Historia y Cultura Militar de Ceuta. Este reconocimiento incluyó un obsequio simbólico que fusiona la fuerza del militarismo con la pluma, símbolo de la cultura. Olmedo expresó su gran orgullo por el galardón, dedicando el premio a sus compañeros y estudiantes, a quienes no ha olvidado en este momento de reconocimiento.

Su enfoque para vincular lo militar con la sanidad ha sido recibido con entusiasmo entre los alumnos. Según sus propias palabras, "los estudiantes están encantados" con las lecciones basadas en la historia militar y la sanidad. Esta dinámica ha sido reflejada en sus Trabajos de Fin de Grado, donde muchos alumnos han presentado investigaciones significativas.

Sorprendida por el premio, Olmedo compartió una anécdota sobre la llamada que le notificó la distinción: "Si no hubiera tenido el número del coronel Portillo, habría pensado que era una broma, porque es un galardón muy importante y estoy muy orgullosa".

El coronel Josémaría Jiménez Portillo también ofreció palabras de agradecimiento a Olmedo, destacando su papel en la formación de los estudiantes de enfermería y en la difusión de la historia militar. A su vez, Antonio Ruiz Benítez, director general del Instituto de Historia y Cultura Militar, subrayó lo valioso que ha sido contar con Olmedo en el fomento de esta área en la ciudad.

Finalmente, tras la entrega del premio, se celebró un evento social en el Casino Militar, donde se congregaron profesionales y estudiantes para honrar el trabajo y el legado de la ya exdecana, que aún deja una huella indeleble en la comunidad educativa.