Eder Militao, central del Real Madrid de 27 años, continúa avanzando en su recuperación tras sufrir una grave lesión al romperse el ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha el 9 de noviembre durante un partido contra el Osasuna en el Santiago Bernabéu. Esta segunda ruptura en menos de un año —ya que en agosto de 2023 sufrió una rotura similar en la rodilla izquierda— ha sido un duro golpe para el equipo y para el propio jugador. A pesar de estos duros reveses, el brasileño mantiene una actitud positiva y se encuentra en la fase final de su rehabilitación. Después del parón de selecciones, comenzará a trabajar en el césped, lo cual marca un hito importante en su camino a la recuperación.

Desde su cirugía realizada por el renombrado doctor Manuel Leyes, especialista en rodillas y médico de cabecera del Madrid, Militao ha estado enfocado en el fortalecimiento muscular de su pierna afectada y en mejorar el estado físico general. Las últimas semanas han mostrado avances significativos en su capacidad para correr, y su rodilla ha demostrado la estabilidad necesaria para dar el siguiente paso hacia su regreso.

Su rutina ha incluido entrenamiento aeróbico moderado, ejercicios de fuerza y coordinación así como actividades de alta demanda cognitiva, similares a las que llevó a cabo Thibaut Courtois durante su extenso periodo de recuperación. Militao ha incorporado tecnología de punta en su proceso de recuperación, utilizando ejercicios subacuáticos en Valdebebas, y en casa cuenta con una cámara hiperbárica para maximizar su regeneración con oxígeno puro.

La combinación del entrenamiento en la Ciudad Real Madrid y en su propio gimnasio, bajo la supervisión cercana de Romario Queiroz, su preparador brasileño, ha sido fundamental. Durante este parón, Militao ha recibido permiso del club para continuar su entrenamiento personalizado en Brasil con Queiroz. En Valdebebas, ha trabajado de la mano con Jaime Salom, fisioterapeuta que ha sido una figura clave en su proceso de readaptación. A lo largo del proceso, se han tomado medidas cuidadosas para evitar una sobrecarga que pudiera resultar perjudicial, dado el deseo del jugador de regresar rápidamente al terreno de juego. En cuanto a su carga de entrenamiento, aproximadamente el 70% ha sido en Valdebebas, dedicando entre tres y cuatro días a entrenar en casa, mientras que el resto del tiempo se ha reservado para el descanso necesario.

El restor mental durante esta etapa es igualmente crucial, ya que enfrentar dos lesiones importantes en un periodo corto puede afectar a cualquier atleta. Sin embargo, Militao ha abordado esta segunda recuperación con un renovado optimismo y una actitud positiva, sintiéndose más motivado que nunca. Según las fuentes cercanas al jugador, su estado anímico es incluso más fuerte y confiado que durante su recuperación anterior, con la esperanza de disputar minutos en la temporada 2024-25.

¿Y qué podemos esperar del regreso de Militao? Si bien su entorno no quiere fijar plazos definitivos, en el club son optimistas y esperan que pueda integrarse al primer equipo en la fase final de la temporada, que se extenderá hasta mediados de julio debido al Mundial de Clubes. Para ponerlo en perspectiva, el año pasado, tras su ruptura el 12 de agosto, regresó a la acción a finales de marzo, lo que significa que si repite ese calendario, existe una buena posibilidad de que esté disponible para el Mundial de Clubes. ¡Estén atentos, ya que el regreso de Militao podría ser más inminente de lo que pensamos!