Ciencia

¿Por qué los europeos están optando cada vez más por no tener hijos? Descubre las alarmantes razones

2025-03-21

Autor: Carmen

En Europa, un número creciente de personas ha decidido no tener hijos, desencadenando una serie de inquietudes respecto al futuro demográfico del continente. Investigadores del Centro de Ciencias Sociales HUN-REN de Budapest, junto con sus homólogos en Suiza y en la Universidad de Padua, han realizado un estudio exhaustivo que revela las cambiantes actitudes hacia la infertilidad voluntaria. Estos hallazgos se han publicado en la revista 'PLOS One'.

La investigación abarcó datos de 27 países y se centró en dos tipos de actitudes hacia la infertilidad voluntaria: las actitudes prescriptivas y proscriptivas. Las primeras se relacionan con la expectativa social de procrear, mientras que las segundas están relacionadas con las percepciones negativas acerca de no tener hijos.

El estudio encontró que en los países con más alta infertilidad, existía una mayor aceptación de la elección de no ser padres, desde una perspectiva proscriptiva. Sin embargo, no se observó un cambio similar en las actitudes prescriptivas.

Un factor determinante en esta decisión es la igualdad de género. En naciones donde este concepto está más avanzado, como los países nórdicos, se observa una mayor aceptación de la infertilidad voluntaria, en parte porque las mujeres en estas sociedades tienen un rol más activo y diverso en el ámbito económico, más allá de la maternidad.

Asimismo, las mujeres y las personas con niveles educativos más altos, especialmente los jóvenes, mostraban más propensión a decidir no tener hijos. Esto puede atribuirse a una conciencia más profunda de las implicaciones en términos físicos, emocionales y profesionales que implica formar una familia.

Lo interesante es que, aunque la situación laboral no mostró correlaciones fuertes con las actitudes proscriptivas, los jubilados parecieron ser más críticos con quienes optaban por no tener hijos. Este desacuerdo podría reflejar diferencias generacionales, sugiriendo que los más jóvenes podrían estar más alineados con la modernidad y las cambiantes dinámicas familiares.

Además, el estudio indica que la religiosidad no impacta significativamente en estas actitudes en términos nacionales, aunque a nivel individual, las personas más religiosas tendían a ser menos tolerantes hacia la infertilidad voluntaria.

Los autores del estudio concluyen que una menor desigualdad de género se asocia con una mayor aceptación de la decisión de no tener hijos, lo que sumerge al futuro de las políticas familiares en un debate trascendental. ¿Estamos presenciando un cambio de paradigma en la sociedad europea acerca del concepto de familia? Está claro que esta reflexión es esencial, así como el impacto a largo plazo que podría tener en la estructura demográfica y social del continente.