Salud

¡Revolución médica! Así es la cirugía endoscópica endonasal para tratar tumores hipofisarios a través de la nariz

2025-04-21

Autor: David

Tumores hipofisarios: un diagnóstico aterrador pero manejable

Recibir el diagnóstico de un tumor hipofisario es como recibir un balde de agua fría; la ubicación del tumor, en el corazón del cerebro, asusta y causa alarma. Sin embargo, la buena noticia es que en la mayoría de los casos son benignos y existen cada vez más herramientas y conocimientos para enfrentarlos con altas tasas de éxito. La cirugía endoscópica endonasal ha emergido como el estándar de tratamiento para los adenomas hipofisarios, como afirman los neurocirujanos Sara Gá Luque y Alberto Acitores del equipo del Dr. Diamantopoulos.

El poder de la endoscopia: una técnica evolucionada

Ubicada en la silla turca, justo detrás de la nariz y encima del paladar blando, la glándula hipofisaria juega un papel crucial en la regulación hormonal del cuerpo. Aunque su funcionamiento puede desregularse, provocando tumores que representan entre el 10% y 15% de los tumores intracraneales, la intervención quirúrgica oportuna puede ser salvadora. Muchas de estas intervenciones se beneficiarán de la experiencia acumulada en los últimos años, especialmente gracias a la creación de unidades especializadas que cuentan con tecnología avanzada.

Abordajes quirúrgicos: ¿cómo se realiza la intervención?

La cirugía endoscópica permite acceder a los tumores hipofisarios a través de la nariz, una vía que minimiza el riesgo y evita cicatrices visibles. Utilizando un endoscopio que proporciona una visualización precisa, los cirujanos pueden operar con una eficacia sin precedentes, localizando tumores complejos con una mejor percepción de profundidad. Este tipo de cirugía, generalmente coordinada con otorrinolaringólogos, ha mostrado reducir complicaciones postquirúrgicas y mejorar los resultados para los pacientes.

El avance constante de la tecnología médica

Recientemente, la cirugía ha incorporado herramientas como el neuronavegador, que genera un mapa tridimensional del cráneo del paciente, y endoscopios con visión en 3D. Esto permite que los cirujanos realicen las operaciones con una precisión insuperable. Aunque estas técnicas están ganando notoriedad en hospitales grandes, las unidades altamente especializadas aún son escasas.

Beneficios de la cirugía endoscópica: menos riesgos, más éxito

Los beneficios son claros: los pacientes pueden evitar la estigmatización de las cicatrices craniales y, además, estas técnicas permiten altas tasas de resección total y recuperación. Sin embargo, se necesita de profesionales altamente capacitados para llevar a cabo estas intervenciones complejas. Es crucial que los pacientes busquen centros especializados que cuenten con equipos multidisciplinarios.

Resultados que sorprenden: la recuperación de los pacientes

Los resultados han sido tan satisfactorios que, en ausencia de complicaciones, los pacientes son dados de alta entre tres y cinco días después de la cirugía. Con un seguimiento adecuado, la mayoría logra retomar su vida normal entre tres a cuatro meses postoperación, a pesar de algunos malestares nasales temporales. Sin duda, la cirugía endoscópica endonasal marca un hito en el tratamiento de tumores hipofisarios.

La clave está en la especialización: un trabajo en equipo

Para alcanzar el éxito en estas intervenciones, es esencial que se realicen en una unidad de endoscopia de base de cráneo donde otorrinolaringólogos y neurocirujanos colaboren estrechamente. La especialización y la alta experiencia son las que realmente marcan la diferencia, garantizando no solo la resolución de complicaciones, sino también la cura definitiva de los pacientes.