El equipo italiano Luna Rossa Prada Pirelli ha logrado una victoria espectacular en la primera edición de la Puig Copa América Femenina, superando al equipo británico Athena Pathway-INEOS, que era el gran favorito, por una diferencia de 8 segundos en la única manga de la final, un Match-Race que mantuvo a todos al borde de sus asientos.

Luna Rossa presentó una tripulación impresionante, destacando a la olímpica y bicampeona mundial Giulia Conti, de 38 años, y la joven promesa Margherita Porro, de 25 años, reconocida por sus cuatro títulos mundiales. Junto a ellas estaban María Guibilei y Giulia Fava, quienes aportaron valentía y destreza durante toda la competencia.

Por su parte, el equipo británico, que contaba con la experimentada Hanna Mills, de 38 años y doble campeona olímpica, además de la tricampeona mundial Tash Bryant, no pudo superar los obstáculos que se presentaron. La campeona olímpica y mundial Saskia Clark, con 45 años, junto a Hanna Diamond, también hicieron su mejor esfuerzo, pero la falta de su habitual AC40 tuvo un impacto significativo en su rendimiento. Dicha embarcación había sido cedida al equipo de Canadá, por lo que tuvieron que navegar con el AC40 reserva del Emirates Team New Zealand, lo que puede haber influido en su desempeño.

El Luna Rossa dominó la regata, manteniendo a su rival entre seis y diez segundos detrás durante la mayoría del recorrido, lo que dejó poco margen para que el Athena Pathway-INEOS pudiera recuperar terreno.

Esta primera edición de la Puig Copa América Femenina será recordada no solo por la histórica victoria de Luna Rossa, sino también por el sobresaliente desempeño del equipo español Sail Team BCN femenino, compuesto por Silvia Mas, Neus Ballester, María Cantero y Paula Barceló, con Nicole Van der Velden como reserva. A pesar de no llegar a la final por solo tres puntos, el equipo logró ganar dos de las cuatro mangas en las semifinales, quedando en tercera posición, lo que representa un gran logro para un equipo joven con una media de edad de 26,2 años.

Con un espectáculo lleno de emoción y competitividad, la Puig Copa América Femenina ha dejado una marca indeleble en la historia de la vela y ha demostrado que el talento femenino sigue surgiendo con fuerza en este deporte.