El presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Rafael Louzán, ha revelado en un evento en la Universidad Rey Juan Carlos que Vigo y Valencia serán propuestas oficiales para ser sedes del Mundial 2030, que España coorganiza con Portugal y Marruecos. Esta noticia llega en un momento tenso, ya que Louzán ha arremetido contra el alcalde de Vigo, Abel Caballero, a quien ha llamado "populista" y ha acusado de avivar una "polémica interesada".

Cabe recordar que el estadio municipal de Balaídos en Vigo había sido inicialmente incluido entre las opciones, pero fue excluido debido a un cambio en los criterios de evaluación. Caballero no ha tardado en reaccionar, mostrando una fuerte indignación tras la filtración de unos audios en los que la extitular de la candidatura, María Tato, mencionaba la necesidad de "ajustar los resultados". En dicha reunión, Tato estaba acompañada de Fernando Sanz y Jorge Mowinckel, ambos desvinculados del proyecto desde hace tiempo.

El alcalde de Vigo no ha dudado en calificar como "insoportable" la falta de transparencia de la Federación y no descarta tomar medidas legales para proteger los intereses de la ciudad. Por su parte, Louzán respondió a estas acusaciones afirmando que todo esto es parte de la estrategia del "alcalde populista de Vigo", poniendo en tela de juicio su compromiso con la reforma del estadio de Balaídos.

Louzán ha criticado la gestión de Caballero, enfatizando que ha pasado 15 años intentando reformar Balaídos, y que no se ha cumplido con el requisito de la FIFA que demanda al menos 40,000 asientos para ser considerado como sede del Mundial. Esta polémica no solo resalta las tensiones entre ambos líderes, sino que también pone de relieve las diferencias políticas entre Louzán, exmiembro del Partido Popular, y Caballero del Partido Socialista.

A pesar de estas controversias, Louzán ha tratado de despejar la responsabilidad de la evaluación del estadio, culpando al antiguo equipo liderado por Luis Rubiales. La extitular Tato fue nombrada en un periodo gestionado por su predecesor, y el actual presidente también ha mencionado que se deberán rendir cuentas a la Comisión del CSD, encabezada por José Manuel Rodríguez Uribes.

En medio de este clima de tensión, Uribes ha apoyado la idea de aumentar el número de sedes, defendiendo la inclusión de Vigo y proponiendo que haya 13 sedes en lugar de las 11 inicialmente previstas. "El camino es muy largo, pero vamos a luchar para que Vigo y Valencia tengan su oportunidad de brillar en el Mundial. ¡Ambas ciudades lo merecen!" ha declarado Uribes, lo que añade un rayo de esperanza para los aficionados del fútbol en estas dos localidades.