El mundo del cine de terror ha perdido a una de sus leyendas: el actor estadounidense Tony Todd, conocido por su papel icónico en 'Candyman' y por sus impactantes actuaciones en la saga 'Destino Final'. Este viernes, a los 69 años, Todd falleció en su hogar en Los Ángeles, según confirmó su representante a Deadline.

Tony Todd, nacido en Washington DC en 1954, dejó una huella imborrable en el cine de terror. Su carrera se inició en el Instituto Nacional de Actores de Teatro Eugene O'Neill en Connecticut, donde perfeccionó su arte. Su primera aparición en pantalla fue en 'Platoon' (1986), dirigida por Oliver Stone, junto a actores de renombre como Willem Dafoe, Johnny Depp y Forest Whitaker.

Además de su trabajo en películas, Todd fue también una presencia habitual en la televisión y el teatro, demostrando su versatilidad como actor. Su capacidad para evocar terror y suspenso, especialmente en su papel como el aterrador Candyman, le valió un lugar en el panteón de los grandes del género.

Las reacciones de sus colegas y fans no tardaron en llegar, con tributos en redes sociales recordando su inigualable talento y su impacto en el cine de terror. 'La vida nunca será la misma sin su voz profunda y su presencia inquietante', escribió un fan en Twitter.

Aunque aún no se han revelado las causas de su fallecimiento, la noticia ha dejado consternados a muchos, quienes consideran a Todd no solo un actor, sino un verdadero icono del terror. Su legado vive en cada película que nos hizo temer y reír al mismo tiempo; su influencia perdurará en el tiempo y en el corazón de todos los amantes del cine.