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¡Trump desata la locura! Aranceles a islas antárticas y a países en crisis

2025-04-03

Autor: Carmen

Donald Trump ha dado un giro inesperado en su guerra comercial, afectando incluso a las remotas islas Heard y McDonald, hogar de pingüinos y completamente deshabitadas, con un nuevo arancel del 10% sobre sus productos. Estas islas, ubicadas cerca de la Antártida y pertenecientes a Australia, están tan alejadas que su acceso requiere un viaje en barco de dos semanas desde Perth. Su última visita humana fue hace casi diez años.

El primer ministro australiano, Anthony Albanese, se mostró alarmado y comentó: “Nadie está a salvo”. Las islas Heard y McDonald se han sumado a la lista de territorios de ultramar de Australia que están sujetos a aranceles, lo que ha generado confusión, ya que estos lugares no son autónomos y tienen un estatus especial con el gobierno federal. Otros territorios afectados incluyen las islas Cocos (Keeling) y la isla Christmas.

Un caso aún más desconcertante es la isla Norfolk, donde un arancel del 29% se aplica a su pequeña exportación de 655.000 dólares en 2023, principalmente en calzado de cuero. Albanese expresó sus dudas sobre la competencia comercial de Norfolk frente a la economía estadounidense, enfatizando lo absurdo de la situación.

Por otra parte, las islas Heard y McDonald reportan unas cifras de exportación misteriosas. A pesar de su condiciones inhóspitas, se estima que en 2022 los EE.UU importaron productos por un valor de 1,4 millones de dólares de estas islas, la mayoría en maquinaria y equipos eléctricos, aunque la naturaleza exacta de estos productos sigue sin aclararse.

En un contexto más amplio, muchos países en crisis están sintiendo el impacto de los nuevos aranceles impuestos por Trump. Myanmar, afectado por la guerra y recientemente golpeado por un terremoto, y varios países africanos son algunos de los mayores afectados. Camboya, con un arancel del 49%, y Laos, a 48%, son los más perjudicados, con estas tasas en el contexto de economías vulnerables donde una parte significativa de la población vive por debajo del umbral de la pobreza.

Los efectos de los recortes de asistencia humanitaria de USAID se suman al desafío para estas naciones, que ya están lidiando con la inestabilidad económica e interna. Vietnam y Myanmar tienen aranceles del 46% y 44%, respectivamente, y se enfrentan a una difícil recuperación tras años de conflictos.

Sorprendentemente, el arancel también se aplica a países que podrían no representar una amenaza significativa para la economía estadounidense, lo que ha llevado a la conclusión de que los aranceles parecen dirigidos a afectar indirectamente a China y su influencia económica en Asia. Siwage Dharma Negara, investigador del Instituto ISEAS-Yusof Ishak, sugirió que al castigar a estas naciones, EE.UU. espera perjudicar las inversiones chinas en la región.

A pesar de que algunos economistas advierten que estos aranceles podrían resultar contraproducentes para las empresas estadounidenses que operan en estos países, Trump continúa apostando por esta estrategia. La introducción de un arancel universal del 10% en todas las importaciones a partir del 5 de abril también genera temor sobre un posible impacto negativo en el crecimiento económico y el empleo en EE.UU.

Todos estos cambios comerciales llevan a preguntarnos: ¿serán estas decisiones el inicio de una nueva era de aislamiento comercial para EE.UU. en un mundo interconectado? La respuesta podría cambiar drásticamente el paisaje del comercio global.