¡Alerta en Uruguay! El conflicto en la industria cárnica pone en peligro el bienestar animal.
2024-12-27
Autor: Emilia
Uruguay es reconocido mundialmente por su liderazgo en políticas de bienestar animal, logrando avances notables en capacitación e infraestructura dentro de la industria cárnica. Sin embargo, la actual situación de conflicto está amenazando décadas de esfuerzos en la creación de una cadena de producción ética y sostenible.
Según un comunicado del Instituto Nacional de Bienestar Animal (INBA), se advierte que “el bienestar animal se compromete gravemente” como resultado de las huelgas que afectan a la industria cárnica. La presidenta del INBA, Marcia del Campo, ha expresado su “profunda preocupación” por los efectos devastadores que estas medidas sorpresivas están teniendo sobre la salud y el trato de los animales.
Del Campo explica que las paradas prolongan la estancia de los animales en los corrales de los frigoríficos, sometiéndolos a estrés, hambre, incomodidad y calor extremo, lo que claramente va en contra de nuestras responsabilidades éticas y legales. Estas acciones no solo perjudican la vida de los animales, sino que ponen en riesgo la calidad de un producto que ha posicionado a Uruguay como un referente internacional en carne de alta calidad.
Las normativas que regulan la industria son claras: el estrés acumulado durante las etapas previas al sacrificio, junto con el incumplimiento de los tiempos máximos de ayuno y la falta de condiciones adecuadas en los corrales, tiene un impacto grave en los vacunos y ovinos destinados a la producción alimentaria. Esto podría tener consecuencias nefastas para la imagen exportadora del país.
Este conflicto no es solo un asunto interno; afecta la percepción internacional de Uruguay como productor responsable. Es crucial mantener la confianza de los mercados globales, donde los consumidores son cada vez más exigentes con respecto a la ética y el bienestar animal.
¡LLAMADO URGENTE A LA ACCIÓN!
Frente a esta situación alarmante, el INBA ha emitido un llamado urgente a todos los sectores involucrados para que prioricen el bienestar animal. “La sociedad uruguaya demanda transparencia y estándares éticos que fortalezcan la reputación del país y satisfagan las expectativas de un consumidor cada vez más consciente y exigente”, concluye el comunicado.
Es hora de actuar. Todos los actores deben unirse para evitar que este desacuerdo se convierta en una crisis que perjudique no solo a los animales, sino también a una de las industrias más emblemáticas de Uruguay.