En un escalofriante incidente ocurrido el viernes por la tarde, César “Rumi” Ahumada, un autodenominado chamán de 54 años, llegó a un Cesfam en Puente Alto con una mujer de 38 años que había fallecido. La mujer acudió a su centro de terapia natural en Pirque en busca de un tratamiento de “desintoxicación”.

Según informes preliminares de la Policía de Investigaciones (PDI), la tragedia se desencadenó cuando Ahumada le administró tabaco líquido, una sustancia utilizada en rituales de purga inspirados en prácticas chamánicas de la Amazonía peruana, que se promocionan en sus redes sociales. Después de consumir el tabaco, la mujer sufrió una descompensación y murió antes de que pudiera recibir asistencia médica.

Ahumada fue detenido en el lugar y enfrentará cargos de cuasidelito de homicidio este lunes. En su sitio web, se presenta a sí mismo como el director del Centro Manto Wasi, que ostenta 18 años de experiencia en el uso ritual de la ayahuasca y otras plantas amazónicas. Según este sitio, el centro promete procesos de “sanación” a través de combinaciones contínuas de plantas de la selva y psicoterapia.

El escándalo no termina aquí, ya que en su página se detalla que “Rumi” se considera un “curandero vegetalista” con más de 20 años de experiencia en rituales de ayahuasca, habiendo sido formado por un maestro en la selva del Amazonas. Sin embargo, su historial criminal incluye un juicio penal en 2009 por porte de drogas, relacionado con la presencia de DMT (dimetiltriptamina) en la ayahuasca que utiliza en sus ceremonias.

Este caso ha suscitado un fuerte debate sobre la seguridad y regulación de los tratamientos alternativos en Chile. Muchos se preguntan hasta qué punto se deben permitir estas prácticas, especialmente parejas con la muerte de pacientes involucrados. Este trágico incidente podría abrir un intenso escrutinio sobre la legalidad y la ética de los rituales chamánicos y su comercialización. ¿Estamos ante un caso aislado o hay más sombras en el oscuro mundo de la sanación alternativa? Las autoridades deben actuar pronto antes de que la tragedia se repita.