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El discurso polémico de Javier Milei sobre las Malvinas y su impacto en Argentina a 43 años de la guerra

2025-04-03

Autor: Benjamín

En Argentina, el discurso de Javier Milei durante la conmemoración del 43 aniversario de la Guerra de Malvinas ha suscitado una fuerte ola de críticas. La Guerra de Malvinas, que enfrentó a Argentina y el Reino Unido en 1982, sigue siendo un tema sensible en la política y la sociedad argentinas.

En un acto celebrado el miércoles en la Plaza San Martín de Buenos Aires, el presidente Milei manifestó su intención de "convertir a Argentina en una potencia" para que los habitantes de las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur "prefieran ser argentinos". Estas declaraciones han generado controversia, sobre todo por su insinuación de que el deseo de los isleños debería basarse en el atractivo de Argentina como nación.

Milei afirmó: "Si de soberanía sobre las Malvinas se trata, el voto más importante es el que se hace por los pies. Deseamos que los malvinenses algún día voten con sus pies a favor de nosotros". Sus comentarios se realizaron en el contexto del Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas, un día en el que se recuerda el sacrificio de los soldados argentinos.

El presidente también reiteró el "reclamo inquebrantable por las Islas Malvinas" y se comprometió a utilizar "todos los recursos diplomáticos para que vuelvan a manos argentinas". Sin embargo, su crítica a gobiernos anteriores, a los que calificó de "corruptos", por no haber logrado avances significativos en el reclamo de soberanía, ha reavivado el debate sobre la política exterior argentina en la región.

Las palabras de Milei no fueron bien recibidas por todos. El gobernador de Tierra del Fuego, Gustavo Melella, expresó su desacuerdo con la idea de que los malvinenses deseen ser argentinos. "No sueño con eso; sueño con que se vayan, ya que no son población originaria", manifestó Melella en un acto en Ushuaia junto a la vicepresidenta Victoria Villarruel, quien ha mantenido serias diferencias con el presidente.

Juan Carlos Parodi, presidente del Centro de Excombatientes de Malvinas, también criticó el enfoque de Milei, afirmando que no se puede hablar de autodeterminación en el contexto de las islas, dado que su población no es originaria. Parodi cuestionó la posibilidad de que Milei pueda revertir 43 años de historia, recordando la política de los Acuerdos de Madrid en la década de 1990, que muchos veteranos consideran una traición a la soberanía argentina.

Santiago Cafiero, exministro de Relaciones Exteriores, se unió al coro de críticas afirmando que es aberrante que un presidente argentino no condene la ocupación británica desde 1833. En su opinión, la autodeterminación no se aplica en este caso debido a la historia de ocupación y el desplazamiento de la población argentina.

Cristina Fernández, expresidenta y opositora de Milei, lo acusó de ser un defensor de los intereses extranjeros en detrimento de Argentina, denunciando lo que describe como un pensamiento "cipayo".

A pesar de las críticas, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, salió en defensa de Milei, argumentando que sus palabras no implican un cambio en la política exterior de Argentina. Según ella, Milei simplemente destacó el fracaso histórico del país en las negociaciones sobre el asunto de las Malvinas, dejando claro que la política debe enfocarse en el desarrollo del país para atraer a todos, incluyendo a los habitantes de las islas.

Este intenso debate sobre el discurso de Milei indica que las Malvinas siguen siendo un punto caliente en la política argentina. Las tensiones entre los distintos sectores del gobierno y la oposición sugieren que la recuperación de la soberanía sobre las islas continúa siendo un tema complejo y polémico, que atrae tanto pasiones como críticas.