Después de dos años desde que estallara el infame Caso Primus, Francisco Coeymans, el exgerente general del factoring y acusado de múltiples delitos, ha hecho una sorprendente declaración ante el Ministerio Público que podría cambiar el rumbo del caso.

A diferencia de sus anteriores testimonios, Coeymans se retractó de casi todo lo que había afirmado en sus declaraciones previas a la Fiscalía y, en un gesto inesperado, pidió perdón públicamente a Raimundo Valenzuela, el controlador de Primus, reconociendo que hubo hechos que realmente son de su responsabilidad.

Coeymans, que desde noviembre de 2024 se encuentra recluido en el anexo Capitán Yáber tras su extradición desde Perú, fue interrogado el lunes por el fiscal Felipe Sepúlveda en la Fiscalía de Las Condes. En su nueva versión, dijo: “Ignacio Amenábar fue quien ideó las operaciones con cheques falsos; él proporcionó los cheques y luego instruyó a Marcelo Rivadeneira [otro imputado] para que los ingresara a Primus por medio de las empresas creadas para tales operaciones.”

En un giro notable, Coeymans admitió que previamente había descalificado a Valenzuela y a Eduardo Guerrero, el vicepresidente del factoring, insinuando que estaban al tanto del presunto fraude. Sin embargo, se retractó de esas afirmaciones señalando: “Me arrepiento de lo que dije en mi declaración anterior del 19 de diciembre de 2023 sobre el señor Valenzuela. Mis comentarios fueron irresponsables, inexactos y fruto de un momento de rabia.”

El exgerente incluso reconoció que tanto Valenzuela como Guerrero le brindaron apoyo durante una crisis familiar relacionada con la salud de su hijo, lo que lo llevó a reflexionar y afirmar: “Fui malagradecido, pido perdón.”

En cuanto a las operaciones de factoring, Coeymans argüió que Valenzuela y Guerrero no estaban al tanto de los cheques falsos, pero admitió que existían operaciones no tradicionales que eran objeto de discusión. "Era verdad que Valenzuela y Guerrero cuestionaban esas operaciones, tratando de reducir la exposición, y a veces logramos continuar con ellas mediante nuestros propios poderes”, agregó.

Sin embargo, el dedo acusador de Coeymans no se detuvo ahí; en un claro ataque, apuntó a Amenábar como el verdadero instigador de los problemas en Primus. Aseguró que, al salir del país para ocuparse de su hijo, se encontró con un escenario caótico, estando Amenábar al mando y aprobando operaciones sin su conocimiento. “Amenábar realizó operaciones que beneficiaban solo a él”, afirmó.

Además, Coeymans reveló que el monto total de las deudas de clientes involucrados en estas operaciones asciende a unos impactantes $53 mil millones, con nombres como Antonio Guzmán y Marcelo Rivadeneira a la cabeza. De este total, cerca de $17 mil millones eran solo por intereses de renovaciones, dejando al descubierto las graves irregularidades del entorno financiero de Primus.

Con estas nuevas revelaciones y un claro arrepentimiento hacia Valenzuela, el Caso Primus podría enfrentar un giro inesperado, poniendo en la cuerda floja no solo a los involucrados, sino a la credibilidad de la entidad misma. ¿Será que la verdad finalmente saldrá a la luz o habrá más sorpresas en este escándalo financiero?