Claro presenta demanda contra Movistar

Claro Chile ha dado un paso contundente en la batalla por la competencia en el sector de telecomunicaciones, presentando una demanda de juicio sumario ante el 18° Juzgado Civil de Santiago. La compañía ha acusado a Telefónica, operadora detrás de Movistar, de incurrir en prácticas de competencia desleal a través de maniobras legales y administrativas que han obstaculizado el desarrollo de nuevas tecnologías como el 5G.

Acusaciones de abuso de acciones judiciales

Según Claro, Movistar estaría abusando del ejercicio de acciones judiciales para impedir el ingreso de ClaroVTR al mercado de servicios móviles 5G. Esto se traduce en un intento de obstaculizar el derecho de los consumidores a elegir libremente sus proveedores de telecomunicaciones, mediante tácticas que, según Claro, son ilegítimas.

Estrategia de freno a la competencia

Desde 2018 hasta 2024, Claro sostiene que Telefónica ha llevado a cabo una estrategia diseñada para frenar su operación en 5G en la banda de 3.5 GHz. La demanda de Claro señala a Telefónica como responsable de una serie de acciones legales orquestadas con un único objetivo: mantener su posición de dominio en el mercado de 5G y retrasar la entrada de Claro en este sector, lo que ha generado un gran daño a su competitividad.

Acciones legales en torno al espectro 5G

La situación se volvió más crítica cuando en agosto de 2023, Telefónica presentó una 'Segunda Consulta de Caps o límites de tenencia de espectro ante el TDLC', que fue retirada en julio de 2024. Según ClaroVTR, esta acción tenía el fin de inhibir el concurso para la asignación del espectro. Posteriormente, ante el lanzamiento de un nuevo concurso 5G, Movistar intentó obstaculizarlo presentando acciones legales que incluso fueron rechazadas por las autoridades.

Aumento en rechazos de portación de clientes

Un punto de fricción clave ha sido la auditoría realizada por Claro en noviembre de 2024, donde se detectó un aumento alarmante en las tasas de rechazo a solicitudes de portación de clientes desde Movistar. Lo que normalmente debería manejarse con un 10% de rechazos, se disparó a un 37%. Claro denuncia que esto es una maniobra para desviar a sus clientes y mantenerlos retenidos cuando intentan cambiarse.

Buscar garantías de legalidad y transparencia

Además, la demanda de Claro no solo apunta a la defensa de su operación, sino que también busca garantizar la legalidad y transparencia en el sector. Según la demanda, las acciones de Movistar no solo van en contra de la libre competencia, sino que también infringen normas fundamentales de protección al consumidor.

Defensa contra tácticas desleales

Claro enfatiza que su intención no es una venganza, sino más bien una defensa preventiva contra tácticas desleales que afectan a la libre elección de los consumidores. La empresa espera que esta disputa lleve a un contexto en que la competencia pueda llevarse a cabo de manera justa, instando a Telefónica a cesar sus abusos.

El futuro de la competencia en telecomunicaciones

¿Qué pasará ahora en este intenso choque de titanes de las telecomunicaciones? ¡La batalla apenas comienza!