Un impactante reportaje de The New York Times ha expuesto graves acusaciones contra el Ejército de Israel, que supuestamente ha estado utilizando a civiles palestinos en la Franja de Gaza como escudos humanos durante su ofensiva militar.

Los testimonios son desgarradores. Mohammed Shubeir, un joven de 17 años, relató su experiencia aterradora tras ser detenido en Jan Yunis. Durante diez días, aseguró que fue obligado a caminar esposado mientras buscaba explosivos colocados por Hamás. "Los soldados me enviaron como a un perro a un apartamento lleno de trampas explosivas", afirmó con temor, añadiendo que en esos momentos sintió que estaba al borde de la muerte.

Otro testimonio conmovedor proviene de Basheer al-Dalou, un farmacéutico que fue forzado a actuar como escudo humano el 13 de noviembre. Al ser interrogado sobre las actividades de Hamás, fue empujado hacia un área de ruinas por soldados que temían por su seguridad. "Detrás de mí, tres soldados me empujaron violentamente hacia adelante", recordó, enfatizando el peligro inminente que enfrentó.

A pesar de que The New York Times destaca que el alcance de estas operaciones es incierto, se mencionan al menos once escuadrones del ejército israelí involucrados en este tipo de prácticas en varias ciudades de Gaza. Desde el comienzo de la incursión militar en octubre de 2023, esta alarmante táctica se ha vuelto más común, poniendo en peligro la vida de muchos civiles.

Al menos siete soldados han confirmado haber sido testigos o participantes de estos actos, que son ilegales bajo la ley de Israel y la legislación internacional. Esto plantea serias preocupaciones sobre la cadena de mando y la supervisión de estas operaciones. Mientras tanto, el general Tamir Heyman, ex jefe de inteligencia militar, admitió la existencia de estas prácticas, aunque el ejército israelí insiste en que sus directivas prohíben estrictamente el uso de civiles para operaciones militares.

Mientras la comunidad internacional aboga por el respeto de los derechos humanos, el conflicto sigue agravándose. Desde el inicio de la ofensiva, se ha reportado que más de 42,400 palestinos han perdido la vida, incluyendo más de 17,000 menores, lo que subraya la tragedia humanitaria en la región. En las últimas 24 horas, el Ministerio de Sanidad de Gaza ha registrado 65 muertes y 140 heridos adicionales, lo que aumenta la cifra de heridos a un total de 99,153 desde el 7 de octubre.

En medio de esta crisis, Philippe Lazzarini, comisionado general de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA), advirtió sobre el hacinamiento extremo en Gaza, donde la mayoría de la población vive en condiciones precarias, en un área que no representa más del 10% de toda la Franja. La disminución de la ayuda humanitaria es otra preocupación crítica, mientras la situación humanitaria se vuelve más desesperante cada día. ¿Hasta cuándo continuará este ciclo de violencia y sufrimiento en la Franja de Gaza?