Una ciudadana chilena, Natalia Pozo, ha denunciado una escalofriante agresión física y verbal por parte de Sebastián Canales, el cónsul chileno en Sidney, Australia. La dramática situación se desencadenó cuando Pozo acudió al consulado solicitando ayuda para repatriar el cuerpo de su hijo, quien falleció en un accidente aún sin esclarecer.

Natalia, que ha estado viviendo en Australia durante cinco meses con su hijo de 18 años, se encontró en un estado de vulnerabilidad tras la tragedia. En una entrevista en el programa "Contigo en la Mañana" de CHV, relató que su intento de grabar la conversación con Canales, que se volvió tensa, terminó en un momento de agresión por parte del diplomático.

La Cancillería chilena ha respondido al incidente, expresando su tristeza y empatía ante la difícil situación que enfrenta Pozo. Se han tomado medidas, incluyendo la instrucción de un sumario para investigar a fondo los hechos ocurridos en el consulado, lo que ha suscitado preocupaciones sobre la conducta de los funcionarios diplomáticos.

Desde la Asociación de Diplomáticas y Diplomáticos de Carrera (Adica) se lamentaron profundamente los hechos, mostrando su apoyo a Natalia en este difícil momento. Aseguraron que la versión del cónsul difiere de la denuncia, pero enfatizaron su compromiso de colaborar plenamente con la investigación para aclarar lo sucedido.

Este caso ha generado un fuerte revuelo en las redes sociales, y muchas personas se han mostrado solidarias con la madre chilena, cuestionando el comportamiento de un representante diplomático. ¿Qué más revelarán las investigaciones? La comunidad está expectante a los próximos pasos en este escándalo que involucra a un cónsul y una madre desolada.