Cobreloa ha dejado atrás el doloroso descenso a Primera B y se encuentra en plena reestructuración de su futuro. Después de las recientes elecciones internas, el club ha comenzado a planificar su estrategia para lograr el ascenso inmediato. Según informes de Sabes Deportes, hay tres refuerzos destacados que están en la mira de los loínos, lo que podría cambiar el rumbo del equipo.

El primer objetivo es el talentoso volante argentino Jorge Luna, que se convirtió en agente libre tras finalizar su contrato con Deportes Copiapó. Luna ya tiene historia en Calama, donde destacó en 2018, llevando a su equipo casi a la gloria en la Liguilla de Primera B, aunque cayeron ante Cobresal. Su regreso podría ser una gran adición para recuperar la competitividad del equipo.

Otro nombre en el radar es el delantero argentino Maximiliano Quinteros, quien también quedó libre después de su paso por Deportes Copiapó. Con la incertidumbre sobre el futuro de Cristian Insaurralde y Javier Parraguez, la llegada de Quinteros podría aportar el gol que tanto necesita el equipo, ayudando a cimentar una ofensiva sólida.

El tercer objetivo, un defensa experimentado, es Ramiro Gonzáalez, quien ahora es agente libre después de su paso por Colo Colo. A pesar de no haber tenido muchos minutos este año debido a la alta competencia, su trayectoria incluye 29 partidos con el Cacique la temporada pasada. Su experiencia podría ser clave en la línea defensiva de Cobreloa.

Además de estos refuerzos prioritarios, la nueva directiva tiene como objetivo asegurar lo más pronto posible la continuidad del director técnico César Bravo, quien ha dejado buenas impresiones en sus cuatro partidos al mando, logrando dos victorias, un empate y una derrota, acercándose a la permanencia por solo un punto. Con un soporte sólido y estas incorporaciones, Cobreloa se prepara para una temporada llena de desafíos, pero con la mirada firme en el regreso a la Primera División.