Ciencia

¡Impactante! Raphael sufre un accidente cerebrovascular: Expertos alertan sobre el creciente riesgo en adultos jóvenes

2024-12-18

Autor: Sofía

Recientemente, el icónico cantante español Raphael, de 81 años, sufrió un accidente cerebrovascular que ha dejado a sus fanáticos preocupados. Este incidente ha llevado a especialistas a plantear serias advertencias sobre el aumento alarmante de casos de accidentes cerebrovasculares (ACV) en personas más jóvenes. Aunque esta enfermedad suele asociarse con la tercera edad, el Dr. Manuel Moquillaza, neurólogo intervencionista y coordinador del servicio de Neurología de la Clínica Ricardo Palma, destacó que los cambios en los estilos de vida actuales y otros factores de riesgo han provocado un incremento en la incidencia de ACV en personas menores de 70 años.

"Un accidente cerebrovascular ocurre cuando el flujo sanguíneo en una parte del cerebro se interrumpe", explicó el Dr. Moquillaza. La falta de oxígeno y nutrientes esenciales provoca que las células cerebrales comiencen a morir en cuestión de minutos. La gravedad del ACV y la rapidez de la intervención médica pueden ser determinantes en el pronóstico, pues puede resultar en daños permanentes o, en casos extremos, la muerte. Los accidentes cerebrovasculares se dividen principalmente en dos tipos: el isquémico, que representa el 85% de los casos y se produce por la obstrucción de una arteria, y el hemorrágico, con un 15%, que resulta de la ruptura de una arteria, originando un derrame de sangre en el cerebro.

Entre las principales causas se encuentran la hipertensión arterial, la diabetes y las enfermedades cardíacas, como la fibrilación auricular. Además, factores como el tabaquismo, el consumo excesivo de alcohol, la obesidad, el sedentarismo y el estrés han ido escalando como potenciales detonantes del ACV. El Dr. Moquillaza también subrayó que el estrés, un factor antes subestimado, es ahora reconocido como un componente crítico en la aparición de infartos cerebrales.

Pero eso no es todo: las secuelas del COVID-19 también han incrementado el riesgo de sufrir esta afección. Los estudios revelan que aquellos que experimentaron una enfermedad severa por COVID-19 tienen una mayor susceptibilidad a ACV, incluso a edades más tempranas. "La epidemiología del accidente cerebrovascular está en cambio, ya no es exclusiva de adultos mayores", añadió el especialista.

Asimismo, la detección temprana de un accidente cerebrovascular puede ser la clave que marque la diferencia entre la vida y la muerte, o entre la recuperación o las secuelas permanentes. Los signos de alarma varían según el tipo: los isquémicos presentan síntomas como dificultad para hablar, pérdida de fuerza en un lado del cuerpo y asimetría facial, mientras que los hemorrágicos se caracterizan por un dolor de cabeza intenso y repentino, náuseas y pérdida progresiva de la conciencia.

La rapidez es esencial en estos momentos críticos. Es vital trasladar al paciente a un centro especializado que esté capacitado para manejar tales emergencias. En Perú, solo algunas clínicas, como la Clínica Ricardo Palma, están certificadas para llevar a cabo tratamientos avanzados. Para aquellos con Seguro Integral de Salud (SIS) o EsSalud, el Hospital Mogrovejo y el Hospital Rebagliati son opciones clave.

Desafortunadamente, se estima que hasta el 90% de los accidentes cerebrovasculares podrían haberse evitado con medidas preventivas. Los especialistas sugieren adoptar hábitos saludables, tales como:

- Controlar la presión arterial.

- Mantener niveles óptimos de azúcar y colesterol.

- Evitar el tabaquismo y el abuso del alcohol.

- Realizar actividad física regularmente.

- Mantener un peso saludable.

- Aprender a manejar el estrés de manera eficaz.

El Dr. Moquillaza recalca que, si se detecta a tiempo, es posible evitar secuelas graves. El pronóstico se evalúa a los tres meses después del evento, siendo este período crucial para realizar una rehabilitación efectiva, que incluye terapia física y del lenguaje, así como un monitoreo constante.

Para aquellos que han sobrevivido a un accidente cerebrovascular, el primer período de recuperación es de 90 días. Durante este lapso, una rehabilitación integral que contemple terapia física, apoyo psicológico y tratamiento neurológico puede resultar decisiva en la mejora de la calidad de vida del paciente. "Es esencial contar con un seguimiento continuo para prevenir recaídas y optimizar las posibilidades de una exitosa recuperación", concluyó el Dr. Moquillaza.

La historia de Raphael es un llamado de atención a la población sobre la importancia de cuidar nuestra salud cerebral, recordándonos que los accidentes cerebrovasculares son una amenaza real, incluso para los más jóvenes. ¡No bajes la guardia y cuida de tu salud!