¡Increíble! Carla Ballero revela por qué vive con su exmarido: "No hay nadie más lindo que él"
2024-12-15
Autor: Valentina
Carla Ballero, la conocida panelista del programa Sígueme, sorprendió a todos al compartir detalles íntimos de su figura familiar durante una reciente aparición en el podcast de Roberto Cox, Nada Que Perder. La empresaria y madre de tres hijos explicó las razones detrás de su decisión de seguir viviendo con su exmarido, Raúl Fergie, a pesar de su separación en 2016.
"No quiero que se vaya tampoco… No hay gateo, no, no existe esa cosa. Como que nuestra pasión duró el principio", confiesa Carla sobre su relación única con Raúl. Lo curioso es que, a pesar de separarse, la pareja decidió continuar bajo el mismo techo para cuidar de sus hijos. Durante la pandemia, las cosas tomaron un giro inesperado cuando Raúl contrajo COVID y no pudo salir del departamento. Desde entonces, decidieron unir fuerzas: "Oye, 1+1, 2, tú tienes plata, yo lo mío, juntemos la wea y chao. Y nunca más nos separamos."
Carla también reveló que, a pesar de la convivencia, no hay posibilidad de reconciliación romántica. "Cero posibilidad. Y yo ni siquiera soy amiga de Raúl porque me conoce a tal nivel que nos odiamos todo el día. Raúl me ve como ‘ay linda, qué insoportable’." La diferencia de edad (20 años) y sus distintas perspectivas sobre la vida dan un toque especial a su relación. Ella, de 46 años, y él, de 64, tienen una dinámica peculiar: "Desayuno a la cama a los hombres. Las mujeres también, pero más como que me ayuden. Mi hija me dice: ‘mamá, tú de verdad, o sea, mal’.
La convivencia no está exenta de humor: Raúl ha desarrollado algunas costumbres inusuales, como comprar un aparato para medirse la presión arterial, que le llevó a decirle a Carla: "¿quieres que te tome la presión?". A pesar de sus constantes bromas, Carla asegura que Raúl es el único hombre que le pone nerviosa, aunque no de manera sexual.
"La tenemos clara. Él saca lo mejor de mí y él dice lo mismo de mí, así que así permanecemos por los niños y yo veo a mis hijos felices", concluye Carla. Su enfoque en la felicidad familiar pone de manifiesto que el amor no siempre se expresa de la manera convencional, y su historia es un testimonio de que el espíritu de familia puede prevalecer a pesar de los cambios en la dinámica de pareja.