Ciencia

¡Increíble! El Alcohol Convierte a las Moscas de la Fruta en Seductores Irresistibles

2025-04-03

Autor: Isidora

Los machos de la mosca de la fruta, conocidos científicamente como Drosophila melanogaster, tienen un curioso acceso al alcohol que proviene de las frutas en descomposición. Este fenómeno no solo incrementa la producción de feromonas, haciéndolos más atractivos para las hembras, sino que les permite navegar por el complejo mundo del apareamiento con un nuevo atractivo seductor.

Un reciente estudio publicado por Science Advances, con la colaboración del Instituto Max Planck en Alemania, revela que estos diminutos insectos poseen un sofisticado mecanismo de control que les ayuda a disfrutar de los efectos del alcohol sin el riesgo de intoxicarse. Esto plantea preguntas fascinantes sobre cómo la química puede influir en el comportamiento sexual.

El Olor Tentador de la Fermentación

La mosca de la fruta se siente irremediablemente atraída por el aroma característico de las frutas en estado de putrefacción, donde las levaduras han proliferado y han iniciado el proceso de fermentación alcohólica. Así, las frutas en descomposición contienen cantidades significativas de alcohol, que se ha demostrado que favorecen notablemente el éxito de apareamiento de los machos, especialmente gracias al metanol, que potencia la producción de feromonas sexuales en estos insectos.

Neurociencia del Deseo: Atracción y Aversión

La fascinante atracción al alcohol está mediada por circuitos neuronales que permiten a los machos evaluar la concentración del olor. Este proceso es clave, ya que deben juzgar si la concentración sigue siendo agradable o si se convierte en repulsiva, evitando así la intoxicación. Investigaciones han identificado tres circuitos neuronales que interactúan para equilibrar la atracción y aversión hacia el alcohol.

"Las moscas han desarrollado un mecanismo de control que maximiza los beneficios del consumo de alcohol sin el peligro de intoxicarse", explica Ian Keesey, primer autor del estudio. Este descubrimiento nos invita a reflexionar sobre el papel que juega el alcohol en la naturaleza y su impacto en el comportamiento de las criaturas más pequeñas.

El Misterioso Mundo de las Vías Neuronales

Los estudios neurofisiológicos revelan que la atracción hacia el alcohol depende de dos vías sensoriales específicas para detectar etanol y metanol. Sin embargo, cuando se enfrenta a niveles excesivos, una tercera vía activa la repulsión. "Es raro que diferentes vías neuronales con valencia opuesta se combinen para equilibrar tanto la atracción como la aversión según el estado fisiológico", agregó el investigador.

Este estudio es uno de los primeros en ofrecer una explicación completa sobre la atracción hacia el alcohol en un modelo de organismo, abarcando desde la química hasta la ecología y recorriendo el cerebro hasta el comportamiento, como destacó Bill Hansson, también del Max Planck.

El alcohol, a menudo visto en un contexto negativo por sus efectos en los seres humanos, parece tener un papel diferente y posiblemente esencial en la vida de las moscas de la fruta, un recordatorio de que la naturaleza a menudo desafía nuestras percepciones comunes.