¡Increíble! Los pumas de Los Ángeles están mutando para sobrevivir en un mundo dominado por humanos
2024-12-16
Autor: Valentina
En las majestuosas Montañas de Santa Mónica, reconocidas por su belleza y cercanía a Los Ángeles, los pumas —esos cazadores sigilosos y astutos— están realizando un sorprendente ajuste de comportamiento. Este cambio no es fruto de una mutación genética, sino una respuesta a la invasión humana en su hábitat natural debido a actividades recreativas. Con el aumento de senderistas, ciclistas y turistas, estos felinos han modificado sus hábitos para evitar el contacto con sus vecinos humanos, optando por salir a cazar principalmente por la noche.
Un estudio reciente publicado en la revista Biological Conservation ha revelado este fenómeno. Durante cinco años, se rastrearon más de 22 pumas en las áreas urbanas de Los Ángeles y Ventura, analizando datos recolectados por el Servicio Nacional de Parques y aplicaciones de seguimiento. La investigación pone de manifiesto cómo estos animales han cambiado sus hábitos cotidianos para compartir su territorio con los humanos sin conflictos.
Este ajuste es crucial para la supervivencia de los pumas, ya que su territorio coincide con rutas recreativas populares. Los pumas que viven cerca de caminos muy transitados, como los senderos en Griffith Park, han aumentado su actividad nocturna de manera significativa. Según los investigadores, esto se debe a la necesidad de escapar de las interacciones humanas, una clara adaptación a su ambiente altamente urbanizado.
Los hallazgos del estudio son alarmantes. Se observó que aquellos pumas en áreas de alta afluencia recreativa se vuelven menos activos durante el día, evitando encuentros que podrían ser peligrosos. En consecuencia, estos felinos podrían estar limitando su actividad hasta una hora más tarde durante las horas diurnas, permitiendo así que su interacción con los humanos sea mínima. Como menciona Ellie Bolas, candidata a doctorado en la Universidad de California en Davis y autora líder del estudio, “Este cambio en la actividad nos muestra que los pumas están haciendo su parte para que la coexistencia sea viable.”
Además, las diferencias de comportamiento entre machos y hembras son sorprendentes. Las hembras son más activas durante las primeras horas del día, probablemente para evitar la competencia y maximizar su éxito en las cacerías. En contraste, los machos, más territoriales y grandes, prefieren moverse bajo la oscuridad, ajustando sus comportamientos según la distribución humana en su territorio.
Los investigadores resaltan que estos cambios, aunque necesarios para la adaptación, podrían tener efectos a largo plazo en la salud y la supervivencia de los pumas. La continua necesidad de evitar a los humanos podría comprometer su eficacia como cazadores, afectando su alimentación y, en última instancia, su bienestar. Incluso, la presión provocada por la presencia humana podría interferir con sus patrones reproductivos y sus interacciones sociales, llevando a un estrés acumulativo que perjudica la salud física y emocional de estos majestuosos felinos.
Dada la alarmante situación, los expertos hacen un llamado urgente a la comunidad científica para que se profundice en la investigación sobre la influencia de la urbanización en la fauna silvestre. La supervivencia de los pumas y su capacidad para coexistir pacíficamente con los humanos dependerá de nuestra comprensión sobre las repercusiones ocultas de nuestras actividades en la vida natural.