
La serie "Adolescencia" y la crisis de la masculinidad: ¿Una advertencia para nuestra juventud?
2025-04-02
Autor: Santiago
En la primera escena de la impactante miniserie británica de Netflix "Adolescencia", encontramos a Jamie Miller, un chico de solo 13 años, esperando en la sala de reconocimiento de la comisaría tras haber apuñalado a su compañera de clase, Katie Leonard. La angustia y el temor se reflejan en su rostro mientras una enfermera le pregunta si podría tumbarse para extraerle sangre. La respuesta de Jamie revela su fragilidad emocional: "No me gustan mucho las agujas..."
A pesar de que el público ya conoce la culpabilidad de Jamie, la serie no se centra en si cometió el crimen, sino en las razones detrás de su terrible acto. Esta narración ha atrapado a 66 millones de espectadores en solo diez días, incluso generando debates en el Parlamento del Reino Unido.
A medida que avanzan los cuatro episodios, el espectador acompaña a Jamie en momentos de vulnerabilidad y angustia, lo que genera un fuerte sentido de empatía. La historia revela las luchas internas de un adolescente que se siente presionado por la sociedad para adherirse a una imagen masculina que le resulta abrumadora.
La radicalización de Jamie tiene raíces en su aislamiento y en la cultura de la masculinidad tóxica, donde la presión por ser "un verdadero hombre" empuja a muchos jóvenes a la introspección destructiva. La serie ilustra cómo el acceso a internet lo arrastra hacia la peligrosa ideología incel, donde una comunidad de jóvenes culpa a las mujeres por su falta de relaciones y expresión emocional.
El fenómeno de la 'manósfera' se hace evidente, donde los hombres jóvenes consumen contenido que no solo los empodera en cuestiones de éxito y fuerza física, sino que también promueve ideas misóginas y violentas. Figuras como Andrew Tate representan estos ideales nocivos que están al alcance de cualquier adolescente a través de las redes sociales.
Pero en vez de ser simplemente un problema de misoginia, los expertos como Shane Satterley argumentan que lo más preocupante es el profundo odio a sí mismos que muchos jóvenes hombres sienten. Esto se conecta con un aumento alarmante en las tasas de suicidio entre hombres, que han visto un incremento del 37% solamente en Estados Unidos desde el año 2000. Estos jóvenes a menudo no son peligrosos para el mundo, sino para ellos mismos y necesitan urgentemente apoyo y comprensión, en lugar de ser estigmatizados.
Una encuesta del King's College de Londres revela que uno de cada cuatro hombres jóvenes considera que ser hombre es más difícil que ser mujer. La narrativa victimista que alimenta la manósfera crea un círculo vicioso que impide el crecimiento y la salud mental de los hombres jóvenes. Es vital abordar esta complicada dinámica antes de que un joven llegue al punto de no retorno.
A pesar de las duras realidades que la serie pinta, existen soluciones. Expertos como Lisa Sugiura sugieren que prohibir el acceso a redes sociales no es la respuesta. En lugar de ello, es esencial un cambio cultural que reconozca y redefina lo que implica ser un hombre en la sociedad contemporánea. La presión por cumplir con estándares heteronormativos y expectativas de éxito tiene que ser desmantelada desde la raíz.
“Adolescencia” no solo es una serie impactante, sino también un llamado urgente a la reflexión. Los creadores subrayan la importancia de tocar estos temas, con la esperanza de generar un diálogo que invite a los jóvenes a explorar sus emociones y desafíos sin temor al juicio. La serie se convierte en un espejo que refleja una realidad que muchos preferirían ignorar, pero que necesita un urgente reconocimiento y acción.