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¿Pueden los rebeldes sirios gobernar efectivamente? Una semana después de su llegada al poder

2024-12-17

Autor: Lucas

Introducción

A medida que el sol se pone sobre las onduladas colinas de tierra roja de Idlib, al norte de Siria, los agricultores se encuentran atrapados entre la esperanza de un nuevo gobierno rebelde y las realidades de un viejo régimen de tributos. Cada año, el ritual comienza con cada prensa de aceite donde un funcionario de Hayat Tahrir al-Sham (HTS) espera con paciencia el 5% del aceite de oliva producido, independientemente de la calidad de la cosecha. Esta situación fue descrita por Ahmad, un agricultor que ha trabajado durante más de dos décadas la tierra de Idlib.

La situación del tributo

El tributo no proviene de un gobierno tradicional, sino del grupo islamista HTS, que ha establecido un sistema de gobierno rebelde en la región desde 2017. En este contexto agrario, donde la producción de aceite de oliva es tanto una necesidad económica como un símbolo de identidad, el impuesto se siente como un recordatorio constante de la opresión.

Gobernanza de HTS

Desde su ascenso al poder, HTS ha establecido una estructura de gobierno alternativa con 11 ministerios civiles, cuyo objetivo es proporcionar servicios y recaudar fondos. Sin embargo, la designación del grupo como organización terrorista por entidades como Estados Unidos y la ONU ha dejado huellas en su manejo. Aunque han adoptado un enfoque más pragmático al distanciarse de sus vínculos con Al Qaeda, la sombra de aquel pasado todavía es evidente.

Adaptaciones y flexibilidad

Orwa Ajjoub, académico en el estudio de grupos yihadistas, señala que aunque tienen una agenda islamista, se han adaptado para interactuar con las comunidades locales. Esto incluye un enfoque más flexible en comparación con las tácticas extremas del Estado Islámico. Por ejemplo, a pesar de que la venta de alcohol sigue prohibida, los residentes afirman que no hay penalizaciones severas para quienes lo consumen en privado y no hay policías de la moral patrullando las calles, lo que brinda cierta libertad a los ciudadanos.

Éxito económico y recaudación de fondos

El éxito de HTS radica en cómo han dominado la economía local. Al imponer impuestos sobre productos esenciales y establecer tarifas en los cruces fronterizos, han logrado generar ingresos significativos, con el cruce de Bab al-Hawa entre Turquía y Siria aportando más de 15 millones de dólares mensuales. Este éxito económico ha permitido a la organización mantener su administración y ejército, lo que les ha otorgado un nivel de estabilidad en una provincia que ha visto crecer su población de 1.5 millones a más de 3.5 millones de desplazados por la guerra.

Transformación militar

La creación de la Academia Militar en 2021 marcó un cambio importante en su estrategia, transformando el grupo de milicias en un ejército más estructurado. Jerome Drevon, analista del International Crisis Group, comenta que este cambio muestra una evolución significativa hacia la modernización de su estructura militar.

Desafíos persistentes

Sin embargo, los desafíos siguen presentes. A pesar de los avances en su gobernanza y economía, las tensiones internas son evidentes. Elementos más radicales dentro de HTS han sido desplazados, pero siguen teniendo influencia, especialmente cuando el liderazgo pragmático toma decisiones que descontentan a las bases, como la construcción de un centro comercial que permite la interacción entre hombres y mujeres.

El futuro de HTS

El futuro del liderazgo de HTS y su capacidad para replicar su modelo de gobernanza en una Siria diversa sigue siendo incierto. Mientras los rebeldes continúan avanzando hacia Damasco, el mensaje de unidad y reconstrucción es crucial, aunque la presión para demostrar que pueden superar su pasado y ofrecer una gobernanza efectiva es constante. Aaron Zelin, experto en yihadismo, menciona que la historia ha demostrado que las guerrillas se enfrentan a enormes dificultades al transitar hacia un gobierno nacional.

Conclusión

En este contexto, cada gota de aceite de oliva que los agricultores de Idlib entregan al régimen de HTS plantea la pregunta: ¿es realmente la estabilidad a un precio que uno puede pagar, o los fantasmas del pasado siempre estarán presentes?