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¡Un chileno conquista el Festival Iberoamericano de Circo en España! La emotiva historia de Esteban Cárdenas

2024-10-08

Autor: Valentina

Esteban Cárdenas, un joven talento de 24 años originario de Puerto Montt, ha logrado un hazaña increíble al ganar el primer lugar en el Festival Iberoamericano de Circo (FiRCO) celebrado en Madrid. Desde los 11 años, Esteban ha vivido de hacer malabares, primero en los semáforos de su ciudad y luego en las calles de Santiago, con el sueño de hacer algo grande que lo aleje de la pobreza.

"Quizás elegí los malabares para escaparle a la pobreza", reflexiona Cárdenas mientras se encuentra en el Teatro Circo Price de Madrid. Su historia es inspiradora: se crió en un barrio humilde, y en su casa compartía habitación con su hermano, en un entorno donde cada centavo contaba y el dinero jamás alcanzaba.

A una edad tan temprana, comenzó a practicar malabares en un parque, convirtiendo simple papel y cinta adhesiva en sus primeras pelotas, hasta llegar a hacer su debut en las calles de Puerto Montt. "A los 11 años entendí que podía usar mi pasión para generar ingresos y ayudar a mi familia", dice con una mezcla de orgullo y nostalgia.

Desde entonces, su vida ha dado un giro impresionante. Ha acumulado ocho récords mundiales y ha viajado por Estados Unidos y Europa gracias a su talento en el malabarismo. Sin embargo, la lucha sigue: a pesar de sus logros, Esteban se pregunta: "¿Solo valgo 15 dólares después de tantas horas en la calle?". Este cuestionamiento lo ha impulsado a querer más y a buscar oportunidades que le permitan salir de los semáforos y alcanzar el escenario.

La participación en el FiRCO ha sido un punto culminante en su carrera. Preparándose solo en las calles de Santiago, experimentó un cambio profundo al competir con otros artistas de diferentes países. "Ver las realidades de mis colegas me hace soñar con la posibilidad de un futuro diferente", confiesa. Su deseo no es solo ser reconocido, sino también celebrar su esfuerzo y crecimiento personal.

Al final del festival, Esteban no solo salió victorioso; también se llevó el Premio Circontinentes, un reconocimiento que honra a quienes destacan en el arte del circo. Con lágrimas de felicidad y satisfacción, afirma: "Mi meta es estar feliz con mi actuación. Si no creo en mí mismo, ¿quién lo hará?". Su historia es un recordatorio poderoso de que, con dedicación y pasión, incluso los orígenes más humildes pueden llevar a alcanzar grandes sueños.