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¡Alerta Roja! La AEMET advierte sobre lluvias torrenciales y tormentas devastadoras en Canarias y Andalucía

2024-11-19

Autor: Ana

La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha activado alarmas en las comunidades autónomas de Andalucía y Canarias debido a la llegada de intensas lluvias para hoy. En La Palma, se prevé que las precipitaciones alcancen los 100 litros por metro cuadrado en un período de 12 horas, lo que ha llevado a establecer un aviso de nivel naranja, indicando un riesgo significativo.

En las áreas de La Palma, algunas localidades podrían experimentar hasta 30 litros por metro cuadrado en solo una hora, mientras que otras zonas podrían ver acumulaciones que alcanzan los 100 litros en 12 horas. Se advierte que estas lluvias estarán acompañadas de tormentas, lo que podría intensificar la situación. Además, las islas de La Gomera, El Hierro y Tenerife están bajo un aviso amarillo, con estimaciones de hasta 20 litros por metro cuadrado en una hora y un total de 60 litros en 12 horas.

Mientras tanto, en Andalucía, las advertencias amarillas se concentran en regiones como Grazalema, la campiña gaditana, el litoral de Cádiz y Ronda (Málaga), donde las lluvias podrían alcanzar los 15 litros por metro cuadrado en una hora, además de tormentas que podrían incluir granizo.

Condiciones adversas en otras áreas del país

El mapa de alertas también incluye zonas de España con advertencias por viento, oleaje o niebla. Asturias, Cantabria y Vizcaya están bajo aviso por fenómenos costeros, con la previsión de fuertes vientos y un oleaje peligroso. Extremadura enfrenta un aviso por niebla, con visibilidades reducidas a 200 metros en varias áreas de las provincias de Cáceres y Badajoz.

El impacto de un frente atlántico

Hoy se espera que una alta presión domine gran parte de la Península y Baleares, aunque un frente atlántico está en camino, lo que podría ocasionar un aumento en la inestabilidad especialmente en el extremo norte. Se anticipan lluvias en Galicia y la zona cantábrica, las cuales podrían ser dispersas y leves. En el Pirineo, la precipitación puede transformarse en nieve a partir de los 2000 metros de altitud.

Asimismo, podría haber lluvias ocasionales en el litoral noreste de Cataluña, en zonas montañosas del centro-norte peninsular, y en varias localidades andaluzas, con mayor incidencia en el Estrecho, donde se prevén tormentas localmente intensas. Las nieblas matinales también afectarán puntos en Galicia, el Cantábrico y las costas mediterráneas, añadiendo un riesgo adicional a la conducción.

Temperaturas en descenso y vientos intensos

En cuanto a las temperaturas, se espera que las máximas suban en el valle del Ebro, Cataluña y el litoral mediterráneo, mientras que descenderán en el noroeste y en las mesetas del este peninsular. Capitales como Santa Cruz de Tenerife (26°C), Alicante y Las Palmas de Gran Canaria (25°C) se destacan por sus temperaturas más altas del día. Sin embargo, se registrarán heladas débiles en los Pirineos.

Los vientos se presentarán con mayor intensidad en la Península y Baleares, alcanzando rachas muy fuertes en el litoral cantábrico y, ocasionalmente, en el Mediterráneo. En Canarias, se notarán vientos del sur que girarán hacia el este, generalmente de carácter leve.

Pronósticos para los próximos días

El miércoles se prevé una jornada más tranquila en Canarias, aunque aún podrían producirse algunos chubascos. En la Península, un frente provocará lluvias en el tercio norte y en áreas montañosas, con la posibilidad de que estas caigan en forma de nieve a partir de los 2000 metros, descendiendo a 1500 metros conforme avance el día.

Las temperaturas se desplomarán en gran parte del país, excepto en las zonas mediterráneas que seguirán agradables, con máximas de 22 a 24°C. Los vientos serán intensos, con rachas destacadas en los litorales.

El jueves se percibirá la continuidad de la inestabilidad, con lluvias afectando el tercio norte y zonas interiores, especialmente en áreas montañosas, junto a precipitaciones en Canarias. A medida que la situación evoluciona, es esencial permanecer alerta ante posibles cambios climáticos y estar preparados para condiciones adversas.