El Deportivo de La Coruña ha demostrado nuevamente su poderío como visitante al vencer al Racing de Ferrol en A Malata por 0-1, gracias a un espectacular gol de Yeremay. Este tanto llegó tras un habilidoso pase filtrado de Diego Villares, quien sigue destacando por su visión de juego. Mientras el Deportivo celebraba, el Racing tomó la iniciativa del partido, pero sus esfuerzos se vieron frustrados una y otra vez por la sólida defensa y el excepcional rendimiento del portero Helton Leite.

El partido estuvo lleno de tensiones y polémicas. En una acción desafortunada, el portero del Racing, Yoel, introdujo el balón en su propia portería tras un saque de esquina, pero el árbitro anuló el gol por falta, generando protestas por parte del equipo blanquiazul.

Este resultado deja al Racing en una situación complicada, ocupando la penúltima posición de la tabla, mientras que el Deportivo, dirigido por Óscar Gilsanz, se alza a seis puntos de la zona de playoff, luego de un sólido desempeño.

Durante los últimos minutos del encuentro, el Racing presionó encarnizadamente buscando el empate, pero la excelente actuación de Helton Leite en el arco mantuvo su meta en cero. El Deportivo, por su parte, supo defenderse y mantener su ventaja, haciendo efectivo el 1-0 que se llevó al descanso.

Más allá del fútbol, el ambiente en A Malata fue electrizante. Los hinchas de ambos equipos se unieron en un conmovedor canto del himno gallego, inyectando energía al partido desde el inicio. Este encuentro, parte de una larga historia de rivalidad entre ambos clubes, se volvió el centro de atención en la jornada, atrayendo una gran cantidad de aficionados.

El Deportivo, que se presentó con camisetas en homenaje a Ximo Navarro, quien está lesionado, mostró un mensaje de unidad y apoyo. A pesar de las dificultades que enfrenta la plantilla, el equipo se mostró resiliente y con una gran disposición para seguir luchando en la competición.

Próximos retos aguardan para ambos equipos, mientras la lucha por la permanencia y la búsqueda de los playoffs se intensifica en la Segunda División. Sin duda, este no fue solo un partido más, sino una manifestación del espíritu competitivo y de la pasión que despierta el fútbol gallego.